Habían pasado 3 meses desde que entre en el equipo, estuvimos compartiendo contra otros institutos y conseguimos ganar a todos, no era por dármelas de crack pero....fuimos el equipo que más canastas encestó y fue gracias a mí. Amalia y yo seguíamos fingiendo ser pareja, ya que Arct estaba muy atento a nuestra relación y no quería que me echase ahora que estaba a punto de conseguir lo que quería, los torneos internacionales empezaban hoy mismo nos iríamos durante 2 meses para competir contra los mejores institutos de otros países, el instituto no puso oposición, ya que haríamos clases virtuales, nada había cambiado mucho salvo....-Hola Nica, hola Amalia - me senté al lado de Amalia en el bordillo besando su mano, después de estar tres meses fingiendo ser pareja había cosas que salían naturalmente
-¿Qué tal James?- Amalia agarró mi cara acariciándola -Nica y yo hablamos de ti
-¿Ah sí? Espero que sean cosas buenas
-Hablamos de lo mal que juegas -Bromeo Nica, Amalia y ella se habían vuelto muy amigas desde el día que Amalia la vio salir del baño, Amalia fue tras ella sabiendo que estaba mal, si algo me gusta de Amalia es que nunca le guardaba rencor a nadie ¿Cómo lo hace? Supongo que eso es lo que la hace ser tan especial, supongo que es lo que le hace ser Amalia, nunca la he visto enfadada o recelosa de nadie
-Bueno eso no lo dice tu camiseta -Amalia sonrió apartando el pelo de su camiseta Amarilla con el número 7 Moore
-Fuiste tú el que mandó a grabar lo de esta es mi novia y soy el mejor jugador del mundo-sonreí, era cierto, cuando Amalia apareció con la camiseta con mi apellido y el lazo amarillo que le regale no puede evitarlo y mandé la camiseta para que le grabasen eso debajo del número de la camiseta
-Yo creo que es un poco tóxico recalcar que es tu novia
-Yo lo veo romántico -susurro Amalia, Nica rodó los ojos haciéndonos levantándose haciéndonos reír, envolví a Amalia en mis brazos mientras reíamos y la pegue a mi pecho
-¿Has hablado con tus padres, te dejarán venir?-literalmente el viaje sería hoy, el autobús estaba a unos metros de nosotros
-Eh...si, a aver se han enfadado un poco...-me puse de pie listo para ir a casa de sus padres -Janes espera ¡No han hecho nada hace mucho que no lo hacen!- desde que Amalia pasaba tiempo en mi casa tenía menos cosas rotas y menos ojeras
-Nunca estás en tu casa es normal que no pase Amalia
-Da igual James, lo importante es que ya no pasa...
Suspiré y agarre su cara entre mis manos -¿Quieres que hable con ellos?
-No te preocupes me han dejado venir, la única condición es que no les pida dinero ni les llamé, si me pasa algo será mi culpa...
-¿Entonces bien no? No nos van a molestar -exclamé con una sonrisa
-Que tonto - se separó de mí golpeando mi pecho
-¡He chicos esperad!-grito Alex acercándose a nosotros junto a Dalia
Amalia corrió hacia su amiga abrazándola y Alex me dio un corto abrazo
-Solo queríamos despedirnos de vosotros tened cuidado son 3 meses fuera
-No les preocupes Alex todo les saldrá bien -nos animó Dalia abrazándome a mí también
-¡Yo no digo que nada vaya a pasar solo digo que tengan cuidado!
-No te preocupes Alex estaremos bien -dijo Amalia abrazándole- Además estaremos aquí para hacer la obra
-Oh genial ¿Y tú James ya te lo has pensado?
Los chicos de la iglesia aún insistían en que participase tocando el piano y aunque haya pasado tardes con ellos en la iglesia no me sentía parte de ella, yo nunca sería amigo de Dios
-Ehh, bueno ya veré cuando vuelvas
-Bueno bueno no te estreses -dijo Dalia -Solo no os portéis mal y manteos a dos metros de distancia -puso sus brazos entre medias de Amalia y yo -ya sabéis por si acaso
Amalia enrojeció - no te preocupes Amalia no sé queda a solas conmigo más de 5 minutos -brome
-Ja ja - río son gracia-¿No deberíamos irnos ya?
-¡James vamos!-grito Liam
-¡Qué esto ya tira!-gritó cabezón
-¡Ya vamos joder no grites!
-James no digas tacos- Amalia me dio un golpe en el pecho
-Siempre digo joder -agarre si mano con la que me pegó
-Pues quítate esa manía, bueno chicos nos marchamos ya...¿Hacemos una oración antes de irnos?-
-Yo te espero en el autobús -susurre pero ella agarró mi mano aún más fuerte
- Quédate por favor, solo está vez...
Mire a mi alrededor y los cuatro nos dimos la mano
-Señor protege a Amalia y James y todos los que van en este viaje, guardarles y no permitas que nada malo les pase, bendícelos y dale la victoria- exclamo riendo- ayúdalos a fortalecerse como equipo y que este sea un viaje inolvidable para todos, pero sobre todos pon en ellos un sentir para que puedan conocerte, en el nombre de Jesús Amén
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Flechazo por equivocación
Teen FictionTodos sabemos que los romances y las apuestas no pueden ir de la mano ¿Qué pasará cuando se confunda el amor? ¿Qué pasará cuando el reto se convierta en un anhelo? Bienvenidos al diario de un trágico chico Al que nada le apasiona ¿Un poco a burrido...