𝖨𝗇𝖾𝗏𝗂𝗍𝖺𝖻𝗅𝖾 ━━ Cristian Romero

━━ siempre vos

𝖩𝖺𝗓𝗆𝗂𝗇

— yo no te lo puedo creer —soltó mi novio de repente mirandome serio

— eh? —solté confundida

— yo siendo todo un romántico y vos subiendo cosas re de trolita —se acercó y dejó un corto beso en mis labios— Igual, estas re buena. Unas ganas de metertela toda —mordió mi labio inferior

— las subo para vos, para que me mires —solté con inocencia

— qué vas a subir para mi! mentirosa —bajó los besos a mi cuello— si a vos te encanta que todos te miren y te digan cosas lindas. Seguro abro tu ig y en esa historia tenés un montón de reacciones de puros virgos, la envidia que me deben tener esos es terrible

llevé una mano a su cabello y di leves tirones del mismo. Ambos debiamos comportarnos ya que Valentin estaba presente en su habitación

— qué me tratas de mentirosa a mi! acá el único mentiroso sos vos. Te encanta andar mirando culos pero si yo subo el mío se te cae todo —lo alejé suavemente jodiendolo

— qué culos voy a mirar yo? —hizo montoncito— si el tuyo me tapa toda la vista

golpeé su pecho con suavidad y dejó salir una pequeña risita

— los que te envían las loquitas tuyas —me crucé de brazos

— no digas pavadas, sabes bien que ni los miro. Además estas en todo tu derecho de revisarme si pensas que estoy haciendo algo malo. —acarició mi cintura— Estuve re loco con vos de chicos y pensas que soy boludo como para mandarme una cagada

— vos también me dejaste bastante más loca de lo normal cuando vivíamos allá —hice referencia a nuestra provincia soltando un suspiro

movió las caricias hacia mis piernas donde comenzó a hacerme masajes mientras estaba sentado

— yo quise creer, por mucho tiempo, que fueron las hormonas de la adolescencia pero no se... Me gustas mucho, en serio —su mirada estaba fija en algún punto del piso

— tanto que te casaste con otra? —me removí obligandolo a frenar su accionar y le sonreí de forma burlesca

— si. Fue necesario para estar donde estamos Jaz, de haber sucedido de otra forma quizas nunca hubiese notado que sos y siempre vas a ser vos

formé un pequeño puchero ante sus lindas palabras y lo abracé escondiendo mi cara en su pecho

— me gustaste siempre Cristián, desde que eras un mono feo en Córdoba

me golpeó sin ser brusco

— ojo con lo que me decís culia' —besó mi cabeza— igual vos también me gustas desde que eras una monita maricona que le quería hacer quilombo a todos y la tenía que defender

— cállate, si vos eras el primero en correr —me reí ante el recuerdo

— si, de correr atrás tuyo, sucia. Encima que vos empezabas el bardo porque no te sabías quedar callada, yo tenía que ligar las puteadas por vos

chasquee la lengua e hice montoncito

— yo te defendía a vos, vos eras el quilombero. Desde chiquito siempre lo fuiste

— si, pero vos también. —se encogió de hombros— Deja de pelearme y dame un beso, enojona linda

giré los ojos dejando que una sonrisa se forme en mi rostro por sus palabras y sujeté su rostro para acercarme y darle un dulce y corto beso en los labios

— te amo, insoportable —murmuré

— yo te amo más, quilombera —besó mi mejilla— algún día iremos a tener una nena juntos?

— una nena? —elevé una ceja

— si, siempre quise una nena. Vos no?

— no lo había pensado tanto pero si, obvio que en algún momento me gustaría tener hijos y si es con vos muchisimo mejor

— en serio? —sus ojitos brillaron

— si, Cris. Obvio que si —acaricié su rostro

— empecemos entonces

— no, salí —solté apenas se abalanzó sobre mi en un ataque repentino de besos

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con amor
L—