Me arrodillo rápidamente al lado de Rapunzel, no puedo detener en lo absoluto que ardientes lágrimas se deslicen por mi rostro mientras veo que, al igual que el oxígeno, algo le está arrancando la vida lenta y cruelmente. La veo peleando contra su propio, arañándolo en un desesperado intento de poder liberarse de lo que sea que estuviera impidiéndole respirar con normalidad, por los sonidos que han plagado por completo este pequeño piso lleno de frialdad y un dolor con el que ya no puedo empatizar, puedo darme cuenta que las demás están en una situación similar.
Siento aire circulando constantemente alrededor de su rostro, como una pequeña vendaval personal. Sé que suena raro de narices, pero sencillamente es algo así, no lo puedo comprender y no lo puedo detener, solo soy capaz de retirarle las manos del cuello cuando noto que se está haciendo demasiado daño en la piel.
Pego un respingo lleno de pánico cuando por el rabillo del ojo veo a un hombre gigantesco parado justo al lado de varios cuadros que enmarcaban fotos de Elsa Snow. Lleva una larga túnica negra sin mangas con un ancho cinturón a la altura de la cintura, su piel negra se funde con las sombras y lo único que realmente puedo destacar sin lugar a duda son sus ojos marrones y sus extensas alas azules oscuras contraídas tras su inmensa figura.
—Lirista, si no haces algo pronto tendré que llevármelas —me dice con toda la calma del mundo, con una voz que es grave y terrorífica pero terriblemente melodiosa. Una extensa guadaña de plateada hoja se aparece de momento a otro en sus manos y con ella señala a Rapunzel—. Sería una pena que luego de esta segunda oportunidad, me tenga que volver llevar tan pronto a tu linda ninfa, ¿no crees?
No sé si tú lo entiendes, pero definitivamente yo no le pude dar sentido alguno a lo que aquel sujeto me estaba diciendo, reconocí que, al igual que la mujer de la jaula de madera, me había llamado lirista, aunque seguía sin saber por qué, pero ahora se había referido a Rapunzel como mi "ninfa" y eso, creo que estaremos de acuerdo colega, tenían incluso menos sentido que lo anterior.
Lo de "una segunda oportunidad" había logrado que me retorciera del miedo, sobre todo porque, por el escalofrío que me rodeó por completo y por un susurro sin sentido que pasó por cerebro, supe que aquel sujeto venía del Inframundo y, que de alguna forma, me hablaba de una muerte pasada.
—¿Conoces la regla del 3 en la supervivencia, cielo? —me pregunta Iduna, logrando que vuelva a prestarle atención a ella. Cuando no respondo en lo absoluto, ella continúa—. 3 minutos sin respirar, tres día sin agua, tres semanas sin comida. Eso es lo que aguanta el ser humano. No os pienso hacer daño, solo quiero presionarte un poco, solo quiero que me prometáis algo, luego os juro que no recibiréis daño alguno.
Se me hace un nudo en el estómago cuando la veo acariciando los cabellos de una Astrid que intenta aferrarse con todas sus fuerzas a la mesa para no terminar retorciéndose en el suelo. Veo a la hija de Niké, la chica a la que reconocía como nuestra guerrera más fuerte en esta desastrosa, rogándole con la mirada a Iduna que parara, que la liberara, pero la mujer solo sigue acariciando su cabeza. Puedo notar que a ella también la lastima, que Iduna Snow realmente no quiere hacer esto, pero eso no detiene en lo absoluto la rabia que siento burbujeando intensamente en mi interior.
De pronto los pequeños vendavales se detienen y las escucho a todas tomando aire. Heather incluso logra levantarse entre jadeos, pero de inmediato todo vuelve a ser como antes.
—¡PARA YA! —rujo contra Iduna Snow, finalmente levantándome del suelo, ignorando el dolor que siento por dejar sola en el piso a Rapunzel.
Tienes que admitir, colega, que es todo un milagro que todavía no le haya rajado el cuello a Iduna Snow.
—Cuando me jures algo por el Estigio, pararé —me dice con simpleza, mirándome fijamente—. Hiccup no planea lastimar a nadie que no se interponga en su pequeña misión, así que podéis solo quedaros aquí, a esperar a que el Olimpo finalmente caiga.
ESTÁS LEYENDO
Percy Jackson y la Venganza por Cleóbula.
FanficEl Olimpo se derrumbará por completo ante la amenaza de un corazón roto y una familia destrozada, desde la tierra surge una oportunidad de salvar a los dioses, la única forma de detener la calamidad que pronto inundará al Monte Olimpo. Y por mucho q...