Había pasado más de dos meses desde que Jungkook se escapó y todo ha sido un caos. Nadie sabe donde está, es como si la tierra se lo hubiese tragado. La policía está más alerta que nunca y ni hablar de las personas que tienen miedo de salir.
Nadie los juzga, porque es más que entendible ese miedo. En especial por todas las atrocidades que ha hecho ese hombre. Una de las más impactantes, o la más famosa, fue hace aproximadamente, unos seis años atrás, antes de que lo capturaran por primera vez.
Jungkook creó una masacre en un parque de diversiones, asesinando a cientos de personas en el proceso. Esa noche, también fue el día que lo atraparon. Recuerdo que cuando le preguntaron la razón de por qué lo hizo, su respuesta fue un simple "estaba aburrido"
El recuerdo de aquella masacre aún atormentaba al país. La gente evitaba hablar de ello, pero era imposible olvidar. Jungkook había sembrado el terror y la tragedia, dejando cicatrices imborrables. Ahora, con su fuga, el temor volvía a apoderarse de las calles. ¿Dónde estaría ahora? ¿Qué nuevos horrores traería consigo?
—Taehyung, si sigues moviendo el pie, vas a romper el piso.
El mencionado se detuvo abruptamente al escuchar la advertencia de Yoongi, quien estaba sentado al frente de su escritorio. Los dos amigos se miraron brevemente, compartiendo la misma tensión y preocupación que pesaba sobre la ciudad.
—Yoongi, estoy desesperado. —lo miro directo a los ojos.
Estábamos en la que es mi oficina. Debido al suceso con Jungkook, mi traslado no se pudo continuar, así que, estoy de vuelta a donde empecé. En el centro psiquiátrico Luna Nueva.
Yoongi es un gran amigo, pero al ser uno de los mejores psiquiatras, siempre está ocupado.
—Lo entiendo, Taehyung, pero necesitas mantener la calma. La policía sigue buscando pistas y no descansarán hasta encontrar a Jungkook. —dijo con determinación, tratando de tranquilizarme.
—Lo sé, Yoongi. Es solo que... siento que cada minuto que pasa, estamos más lejos de encontrarlo y más cerca de que cometa una atrocidad —respondo con pesar, mirando por la ventana hacia la ciudad sumida en el temor.
—Tranquilízate, Taehyung. —volvió hablar el peli menta con calma— Y dime, ¿por qué estás tan asustado? Entiendo que le tengas miedo, pero no es como que él te venga a buscar o algo por el estilo. Lo más probable es que esté saliendo del país.
El castaño se acomodó en la silla y suspiro.
—¿No te lo han comentado?
—¿Comentarme qué?
—Sobre la obsesión de Jungkook hacia mí.
Yoongi frunció el ceño, claramente sorprendido por la revelación.
—¿Obsesión? —preguntó, inclinándose hacia adelante con interés—. No, nadie me ha dicho nada de eso. ¿Desde cuándo sabes esto?
Me pasé una mano por el cabello, tratando de mantener los pensamientos claros.
—Él me lo confesó. —dije— Y no solo eso, también me amenazó con ser su pareja, diciendo; que si no aceptaba me asesinaría.
Yoongi quedó en silencio, procesando lo que acababa de escuchar. Los rumores sobre Jungkook siempre habían sido espeluznantes, pero esto añadía una nueva dimensión a la situación.
—Entonces, si esto es cierto, estás en peligro inminente. —concluyó Yoongi, su voz cargada de preocupación— Debemos alertar a las autoridades sobre esto. Podrían poner protección para ti.
—No quiero que esto se convierta en un circo mediático. —dije, tratando de mantener la calma— Ya bastante tienen con tratar de atraparlo. No quiero ser el centro de atención. Necesito pensar con claridad.
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Mi Dulce Sufrimiento. [KookTae]
Diversos- Jeon Jungkook. - ¿Es de él del que quieres hablar? - Así es... quiero que tengas mucho cuidado con él, Taehyung, es muy peligroso. - Creo que deberías de decirle eso a su psiquiatra. - ¿Aún no te lo han informado? - ¿Que cosa? - Es exactamente p...