El chico me había dejado muda, no me lo podía sacar de la cabeza, era inexplicable la sensación que tenía..
Cuando se fue me quedé por lo menos 5 minutos viendo por donde se había ido, cuando me empezó a chocar gente—porque literalmente estaba en medio de la vereda—Empecé nuevamente a caminar en dirección a la casa de Perla.
Con muchos pensamientos en la cabeza.
Miraba por todos lados, como si me fuera a topar con el chico sin nombre, entre el sol que se colaba por los grandes árboles me permití disfrutar del simple paisaje de Buenos Aires.
Cuando llegué a la casa de Paula y saqué mi celular varias notificaciones de Thomas aparecieron en mi pantalla.
No quería verlo, no quería saber más nada de él.
Me había lastimado con sus palabras, pero en el momento que me presionó y no me dejó salir fue simplemente aterrador.
Porque de verdad creía que él era la persona con la que estaría el resto de mi vida, no en el plano romántico, pero si esa amistad real que siempre uno espera encontrar.
Ya que desde que tengo memoria él ha estado en mi vida, en trabajos escolares, navidades.
Fue un golpe duro aceptar que es lo mejor que tomemos caminos separados.
Aunque al principio duela.
Todos hablamos de cuando perdemos a un ser querido, pero, ¿cuando perdemos a alguien en vida?.
¿Podremos vivir sin esa persona que estuvo por un tiempo en tu vida?
¿Cómo lo superas?.
Todas esas incógnitas me estresan, pensar que no podía simplemente ir y contarle a mis papás lo que pasó con él, tenía que recurrir a mi profesora.
¿Por qué simplemente no me podía tocar una familia que me aprecie y me proteja?.
Mi pecho lo sentía entumecido por todos los sentimientos que me había guardado, el cuerpo lo sentía demasiado pesado.
Rompí en llanto, sin que pudiera evitarlo mis piernas se pusieron como gelatina y caí de rodillas al suelo, lloré, grité, me recosté contra la pared del pasillo y lo único que pude hacer es quedarme ahí.
Existente.
Intentando que los malos pensamientos no me ahogaran.
¿Mis padres me extrañarán?
¿Al menos un poco?
No se cuanto tiempo estuve así, se que fue lo suficiente para quedarme dormida.
***
—Luana despierta—fue lo primero que escuché al abrir mis ojos.
El dolor de espalda era real.
Nota mental: Nunca dormir apoyada en una pared.
—Perla?—dije con la voz ronca por la "mini" siesta que me había tomado.
Ella me miraba con una clara preocupación en su rostro, Se había arrodillado enfrente de mí, apoyó sus manos sobre mi rostro.
—¿Por qué estás sentado en el piso?—preguntó.
—Me estresé yy—dije apenas audible—No lo sé, el resto es todo muy borroso.
Ella me sorprendió con compasión y me dio un abrazo reconfortante.
— ¿Pasó algo que debía preocuparme Luana? — preguntó ella de nuevo.
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Un novio por accidente
RomanceLuana piensa que tiene su futuro resuelto, ama bailar y esta contenta con la vida que lleva, pero por una decisión hace que su vida gire para siempre. Hace que deje todo lo que conoce y comience su nueva etapa en Buenos Aires, sola en su departam...