Sentimientos a medianoche - Héctor Fort

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3 meses después

23 de Diciembre, 2024

Este año iba a pasar las navidades en Estados Unidos, pero no sola, sino que iba a estar acompañada por mis amigos. Pero habíamos decidido que el mejor lugar para pasar las navidades sería Nueva York, así que entre todos alquilamos un duplex en un edificio de Manhattan, en el Upper East Side, para pasar las navidades.

Por lo tanto yo acababa de aterrizar en el aeropuerto de Nueva York tras un vuelo de cinco horas y media desde Los Ángeles.
Al aterrizar me pidieron varias fotos, así que me di prisa para salir de allí lo antes posible, ya que si comenzaban a reconocerme no saldría de allí nunca.
Mi fama había aumentado considerablemente desde que comencé a grabar la película, ya que compartía set actores bastante famosos y además me invitaban a muchos eventos conocidos.

Así que salí rápidamente del aeropuerto y subí al coche que me esperaba fuera y que me llevó hacia el apartamento.

Cuando llegamos le agradecí al chofer por su servicio y cogí mis cosas pasa subir al apartamento y descansar hasta que llegasen los chicos.
Aproveché que era la primera en llegar para elegir la mejor habitación; una con ventanales enormes con vistas a todos los edificios, tenía una cama de matrimonio enorme, tumbarse ahí era como tumbarse en una nube, además la habitación tenía un gran vestidor y un baño precioso.

Me puse cómoda y encendí la calefacción ya que la casa estaba helada.
Después me tumbe en la cama de la habitación que había elegido.

Hoy vería a Héctor después de 6 meses, ya que la última vez que estuvimos juntos en el mismo grupo fue en Junio, desde entonces solo nos habíamos visto de lejos pero tampoco lo considero gran cosa. Esta vez conviviríamos juntos bajo el mismo techo durante más tiempo.

El que propuso que Héctor viniese fue Pau, y yo a pesar de nuestro distanciamiento no me iba a negar, ya que él tiene el mismo derecho que yo a estar aquí, ambos somos del mismo grupo de amigos.

Aproveché que los chicos no llegarían hasta dentro de cuatro horas para echarme una larga siesta, ya que cuando ellos llegasen tendríamos que irnos a comprar porque no tenemos nada para comer aquí y además mañana es nochebuena.

Tras una larga siesta, de la cual me desperté al escuchar el timbre, me levanté de la cama y fui a abrir, encontrándome con los chicos.

El primero en el que me fijé fue en Héctor, que estaba detrás de todos, pero rápidamente rompí el contacto visual para mirar a Marc y sonreírle

- ¡Hola! -dije feliz abrazando a los dos primeros que estaban frente a mí, Lamine y Pau.

- ¿un autógrafo no? -bromeó Lamine y yo reí

Cuando me separé de Lamine y Pau me acerqué a Marc y le abracé. Antes de separarnos puse mi mano en su mejilla y le besé.

- Venga pasad, deberéis de estar agotados por el viaje -dije separándome de Marc y entrando

- Ostia, que guapo está esto -dijo Lamine

- Deberíais de ir escogiendo habitación, yo ya lo he hecho -dije

- No es justo, te habrás quedado la mejor -se quejó Marc

- Privilegios de llegar antes -dije guiñándole un ojo