Capítulo Cinco. Sumisión.

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Hoy se cumplían tres meses desde que estaba al mando de Shishigumi, cada día era un tipo de sumisión a aquello que detestaba para intentar mantener un control hipotético sobre una organización que había estado indirectamente relacionada con mi vida desde la niñez, una organización que estaba llena de aquello que tanto detestaba, "los carnívoros".

La carne aquí era un tipo de moneda de cambio, algo que todo carnívoro necesitaba y podía conseguir por cualquier medio, haciéndolo el mismo, comprándolo o incluso pidiéndolo, solo debía ser uno de ellos y tendría aquel "manjar" que amaran más, aquella carne que más disfrutarán en el paladar.

Era curioso que para la persona que más cerca estaba de mi e incluso me protegía tenía como carne favorita la de "venado" (mi especie) y sin importar eso podía verme como un igual, alguien cuya vida no estaba a merced de él o de otros carnívoros, sino de si mismo. Esa persona se llama Ibuki, alguien firme, con una convicción notoria, respetuoso y sobretodo leal, alguien que por más enemigos que tuvieras estaría de tu lado sin importar nada, alguien que podrías considerar único entre los de su especie.

Shishigumi más que una corporación criminal era un tipo de manada, una familia que entre sus miembros se cuidaban, al principio era por mero miedo y por imposición pero ahora, era una uniom forjada en respeto y admiración hacia el líder. Entendían su lugar entre todo tipo de carnívoros, pero uno de ellos, Ibuki incluso en las situaciones más críticas o donde la confianza lo era todo siempre me cuidaba y protegía de cosas que yo no podía manejar por mi inexperiencia en este campo.

—Jefe, debemos irnos al almacén, hay un nuevo problema— dijo uno de mis hombres y asentí, Ibuki me coloco mi abrigo y salimos hacia allá, al parecer había una falla con la mercancía, había piezas de "deudores" que aún no podían enviarse a otros negocios por problemas con su procedencia, aunque no fue tan difícil agilizar todo con algo de presión para seguir con el negocio mis hombres estaban aún asombrados por la facilidad con la que me había acoplado a este mundo.

Ya de regreso pasamos por una zona de bares donde habían otros carnívoros y herbívoros ofreciendo "compañía" a quienes pasaban, mis hombres no sugirieron nada pero bajaron la velocidad en caso de que quisiera bajar o contratar a alguien.

—¿Desea bajar a algún bar, señor?— pregunto Ibuki mientras me miraba desde el retrovisor, yo solo negué.

—No quiero beber fuera de mi habitación, prefiero hacerlo a solas— dije y bebí un poco de agua de una botella que aún guardaba en el portavasos.

Así fue como llegamos a lo que podría llamar "mi casa" y entre a mi habitación, estaba débil por aguantar el hambre y no poder hacer más que aguantar las náuseas al comer, incluso considere arrastrarme hasta alguna tienda de conveniencia a escondidas para alimentarme, hasta que estuche un par de golpes en la puerta y al abrir mire a Ibuki con una charola de comía vegetariana, en ese momento pensé en golpear aquella bandeja y tirarla, pero no me quedo más que dejarlo entrar.

—¿Te burlas?, ¿Por qué haces algo tan inescesario?— pregunte en cierto tono molesto y mire la comida, él me mostró una bebida que yo consumía frecuentemente para obtener algo de vitaminas y suspiró.

—Le he visto más delgado y con sueño, debe alimentarse, y no debe fingir con nosotros, si quiere que todos comamos lo mismo o no, lo respetaremos— contestó mientras abría la charola y me servía una bebida de zanahoria.

No sabía si sus palabras eran una prueba o no, así que solo pensé en el hambre que sentía y me senté empezando a devorar toda la ensalada —Supongo que, te agradezco esto, pero deberías evitar hacerme enojar, no soy tan débil como parezco, puedo comer carne también— dije seguro hasta que el miro el bote de basura que estaba extrañamente limpio, eso solo me confirmó que el sabia sobre lo poco que toleraba comer sin vomitar, así que no dije más.

El se quedó ahí hasta que acabe y luego recogió la basura.

—Jefe, yo lo sigo por admiración y devoción a su persona, me ha hecho ver a los herbívoros como algo que es incomprendido por mi y los carnívoros por completo, estoy totalmente embelesado con su persona, así que no diré nada que le perjudique o incomode, téngalo en cuenta— dicho eso él hizo una pequeña reverencia para poder retirarse, aunque él se detuvo cuando yo me levanté.

—Ibuki...— le mire seriamente y me acerque a él —¿No estás pensando en engordarme para devorarme, verdad?, tu carne favorita son los venados, ¿O me equivoco?— acerque mi mano a su boca y acaricie sus labios mirando sus colmillos, quería saber si el empezaba a salivar, si el mostraba sus dientes como lo haría un depredador con su presa, sin embargo al ver sus ojos note un sonrojo en su rostro y una mirada que no era propia de un depredador.

—No podría devorarlo jefe, a menos que se fuera, en ese caso si no tengo más opción para hacer que se quede, intentaría guardarlo en mi como último recurso— contestó firme y antes de que pudiera reaccionar a su inusual respuesta sentí su barbilla en mi mano y su mirada conforme se acercaba a mi hasta que el sonido de otros toques en la puerta le hicieron retroceder y aclarar su voz.

—Sera mejor que descanses, mañana tenemos trabajo que hacer— le ordene y bebí aquel jugo para que no lo vieran los demás y el volvió a reverenciar antes de retirarse con los demás, yo observé mi mano y la charola —¿Qué fue todo eso?— me quite la corbata y zapatos, para después dejarme caer en la cama, pensar en que un carnívoro se comportará de forma tan complaciente me había hecho sentir inusualmente extraño, a tal punto que no pude dormir bien en casi toda la noche por pensar el por qué y si lo había sentido anteriormente...

Devorame - Beastars [Riz x Tem] [Legoshi x Pina] [Ibuki x Louis]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora