¿Si tú pudieras hacer que la persona que amas se quedará a tu lado por siempre, aceptarías tenerlo aunque eso te aleje de tu vida normal?, yo al ser alguien con algunos problemas puedo decir que sí, yo prefería tener una vida corta con él que una vida dónde alguien más pudiera quitarmelo, en especial, alguien con quién no podría competir por su amor... Era algo común en mi ciudad que si una relación de amigos o pareja terminaba simplemente se despedían y no volvía a verse, pero había otros casos donde el "amor" hacia que cometieran actos impensables como devorar al otro para que se quedara a su lado siendo parte de él en su ser y cuerpo.
Suena egoísta el hecho de que obligues a alguien a estar contigo aún sin amor, más aún cómetelo pero a veces eso parecía algo ligado a los instintos. Mi instinto de tomar lo que deseo para que nadie más lo toque nunca fue algún problema, sin embargo el hecho de que era muy gentil para ser un carnívoro me hacía creer que solo fingía. El pensar que siempre aparentaba ciertas emociones o actitudes por sentirme un monstruo me hacian cuestionarme mis límites o mi control ante mis pensamientos y un día sin previo aviso alguien me miró de una forma tan sincera que no podía creer que me estuviera pasando.
Tem, ese nombre tan corto pero con tono dulce se convirtió en mi amigo más íntimo, él era realmente fuerte y sincero, era curioso por naturaleza y especialmente empático con todos, mi mente se mantenía más cuerda al estar a su lado y aquello efectos negativos por mis ataques de ansiedad o por la medicina que debía tomar para no herir a nadie me hizo desear tener esa calma por siempre.
Lamentablemente mi deseo de tenerlo siempre me hizo cuestionar si era realmente sincero con él, si esto era real o solo estaba fingiendo alguna relación entre él y yo, ¿Está amistad era verdadera?, ¿Un carnívoro podría ser amigo de su propia presa?, no lo sabía y aun así desee saber la respuesta. Pedí verlo una semana después de dejar de beber mis supresores, me sentía bien y tranquilo, en especial emocionado de ser yo mismo frente a él, esto hace tres meses.
Ese día él llegó a nuestro encuentro y conversamos, el estaba tan asustado cuando le conté sobre mi suspención de los inhibidores, lo cual estaba relacionado al miedo de que pudiera herirlo, y eso pasó, mi fuerza llegó a lastimarlo, le perseguí para intentar demostrarle que no lo lastimaría pero la curiosidad de probar su sangre me invitó a probar la que había quedado en mis garras, y en cuanto lo hice mi boca se llenó de un cosquilleo, pude sentir el aroma de Tem como nunca antes, y finalmente desee tener más de él.
Llegamos a una sala abierta, el seguía asustado, decía que era uno más de esos monstruos que estaba matando herbívoros y que solo lo veíamos como comida, incluso hasta el momento de tenerlo cerca no flaqueo y siguió gritando, aunque con facilidad cubrí su mano con mi mano y mordí su hombro, su sangre era tan cálida, dulce y casi embriagante pero no podía ir más allá.
—Tem, no entiendes...— susurré recostandole en el suelo sujetando sus manos para que me viera —Yo no te veo como carne, solo te veo como Tem... No necesito nada más si te tengo, no necesito carne o medicina, solo tu me das paz...— dicho esto cubrí su boca hasta que quedó inconsciente y lo cargue para llevarlo a otro lugar.
En este momento ya había cruzado un límite imperdonable, el de quitarle su libertad, pero no me arrepentía, lo deje en un edificio viejo a dónde a veces iba a encerrarme cuando tenía ataques de pánico cerca de la escuela, abrí el sótano y lo recosté en una cama improvisada que tenía, con las vendas que aún me quedaban vende su hombro.
—Perdoname Tem, intenté controlarme un poco más— luego de eso mordí otra parte de su cuello acariciando su mejilla y su mano —Eres tan suave— susurré sin poder contenerme muy bien y luego vende su cuello. No podía beber más o podría provocarle la muerte, me separé de él y acaricie de manera suave su brazo —Estaras bien Tem, solo será hasta que me perdones...—
Use unas sogas para atar sus brazos y me recosté a su lado mirándolo dormir, debía cuidarlo, debía protegerlo y no dejar que se alejara de mi, necesitaba poder recuperar su perdón, y si no lo hacía podría aún tenerlo para mí siempre que quisiera si lo devoraba, algo que no quería hacer pero que haría para que no nos separaran jamás.
La noche pasó, Tem despertó casi al amanecer y empezó a forcejear, tome sus manos y negué ocultandome en su cabello —No lo hagas Tem, te vas a lastimar— susurré sintiendo su cabello erizarse, me oculté en su nuca y lo abracé —No tengas miedo, nadie te lastimara aquí, yo te cuidaré—
Al principio Tem lloraba e intentaba safar sus manos todos los días, incluso aunque se lastimaba seguía intentando, y cada que iba a verlo yo lo curaba y le alimentaba, cada fin de semana, me acercaba a él y mordía alguna parte de su cuerpo para beber su sangre y tocar su pelaje tan fino y suave.
—Tem, no quiero devorarte, por favor, perdoname— susurré suave y bese su nuca empezando a vendar su muslo y dejé un beso ahí —Mi hambre por ti sigue igual, pero ahora siento que no es un hambre que me pide carne, es un hambre carnal... En serio desearía algún día que podamos llegar a ese nivel de intimidad Tem, ¿Algún día podremos?— pregunté, pero el solo me miró asustado y asintió, en este tiempo el había entendido mejor mi postura y era menos altanero que en el primer mes
Para calmarlo bese sus labios aún estando entre sus piernas y acaricie sus muslos. —Todas estás marcas son para sentir que eres mío, prometo que dejaré de hacerlas cuando esté satisfecho, solo dame tiempo—
Cerré la puerta y regrese a la escuela como si acabará de ir a correr, nadie pensaba nada malo de mi en ese momento, solo tenía amigos y compañeros que les agradaba y me veían aún más feliz que antes, yo enserio me sentía lleno, mi hambre aunque creciente se mantenía controlada y mis pensamientos poco a poco se iban enfocando más en Tem, mi salvador... No dejaría que nadie me alejara de él, y si era necesario, mataría a todo aquel que quisiera alejarlo de mi.
—Incluso tú, Legoshi— susurré al verlo a la lejanía y seguí mi camino a limpiar el teatro, si seguía metiendo sus narices después de aquella advertencia, no me quedaría más remedio que silenciarlo y hacerlo callar.
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Devorame - Beastars [Riz x Tem] [Legoshi x Pina] [Ibuki x Louis]
FanfictionPina, un atractivo carnero ha llegado al club de teatro luego de la inesperada ausencia de Louis y la desaparición repentina de Tem. Estos sucesos generan problemas entre los alumnos al haberse desatado una paranoia colectiva entre herbívoros y carn...