Estúpido Y Sensual Akutagawa

Lo que creemos merecer

Perdón por las tardanzas, pero desde que no tengo trabajo es más difícil publicar, se que debería ser al revés, aunque bueno este capítulo es muy destructivo y más largo de lo habitual.

Akutagawa logró bajarse del escenario molesto, más que nada porque lo único que quería era no ver a Atsushi esa noche, deseaba perder su mente de su apestosa vida, pero aquí venía el culpable de todos sus males, haciendo un escándalo, buscando controlarlo, molestando a sus amigos y a su jefe, todas personas que venían a apoyarlo por  de su estupidez,— Agencia, les ordenó que suelten a mis superiores — ordenó Higuchi que intentaba mediar la situación tanto como se podía de una mujer como ella, odiaba las traiciones y consideraba que cualquiera que cometiera una era basura,— Cállate — contestó Dazai,— ¡Oiga! ¡Nadie que no sea de la mafia manda a callar a Higuchi! ¡Solo nosotros podemos! — replicó Chuuya, para este punto su discusión llamaba la atención,— Todos vamos a salir antes de que arruinen mi negocio — ordenó Mori aceptando salir con Fukuzawa, aunque primero se soltó de su agarre, lo mismo hizo Chuuya seguido por Akutagawa quien ni siquiera vio a Atsushi, los miembros de la agencia estaban por ir detrás hasta que Kajii y Higuchi se atravesaron,— Nosotros primero — soltó el científico, le gustaba un buen chisme de primera fila, aunque hasta para él esto era el colmo, actuaban como idiotas esos tres, mientras Higuchi llamaba a Kouyou quien no quería involucrarse en esas cosas, pero se necesitaría toda la ayuda posible, por algún motivo sabía que esto se iba a descontrolar.

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Se encontraban en el estacionamiento,— Doctor Mori necesito hablar con usted a solas — dijo Fukuzawa adelantándose,— Qué coincidencia, yo quiero mantenerme lejos de usted, ahora largo de mi establecimiento — soltó Mori,— Lo dice como si este sitio fuera legal — se quejó Fukuzawa,— Lo suficiente para que si llamo a la policía tendrá la opción de resistirse al arresto o dejarse que se lo lleven en una patrulla junto con su séquito de tarados — aseguró Mori mientras indicaba a los miembros de la agencia,— ¿Creí que eras mejor que esto Dazai? No sé traiciona a la persona con la que duermes — replicó Mori, estaba harto de las estupideces y hoy parecía que el mundo se había vuelto loco,— ¿Para que llama a la policía? Ahora los saco a patadas — amenazó Chuuya, no podía creer está situación, ellos tres eran hombres solteros, adultos, con un empleo y el dinero suficiente para pagar sus gustos, podían hacer lo que quisieran con su vida y eso incluía divertirse en un bar,— ¿Te parece que ir a un bar hasta acabar en la cama de un extraño está bien? — preguntó Dazai,— ¿Y a ti que te importa lo que haga? — atacó Chuuya, está noche no se iría con nadie y aunque así fuera Dazai no podía darle órdenes,— No eres ni mi novio, ni compañero y mucho menos somos amigos, así que no voy a escucharte, eres un traidor que se largo y que tengo suerte no me pegará una ETS — atacó Chuuya, el no podía darle órdenes, Dazai al igual que Fukuzawa estaba por replicar, pero Atsushi se adelantó,— ¿Akutagawa podemos hablar a solas? — cuestionó Atsushi, quería hablar tranquilo y no ventilar su vida.

Akutagawa tenía el ceño fruncido, con los brazos cruzados y una mirada de querer matar a alguien,— Tienes 5 minutos — luego de ello Akutagawa se fue siendo seguido por Atsushi, nadie sabía que iba pasar, Atsushi estaba seguro que hablando lo resolverán.

— Tienes 5 minutos desde ahora — soltó Akutagawa al mismo tiempo que revisaba su reloj,— Se que cometí algunos errores, pero se que podemos solucionarlo, yo se que si escuchas mi versión podras perdonarlo — estaba por iniciar como todo esto paso, no debían terminar, sabia que lo habia lastimado, aún así creía que podría solucionarlo,— Siempre dejo que la gente que me lastime vuelva a mi vida — dijo Akutagawa interrumpiendo a Atsushi,— ¿Me lastimas? Okey, debí ser mas fuerte. ¿Me fallas? Está bien, fue mi error pedirte tanto. ¿Me abandonas? Correcto, lo merecía por ser tan necesitado de tí, debí sofocarte… — explicó Akutagawa, mientras mantenía la mirada en el suelo,— Puedes romperme en mil pedazos, después llevártelo todo y aún así me levantaré para poder recibirte otras vez en mi vida, culpandome de tus errores, que yo fui quién nos arruinó — dijo Akutagawa sus manos se apretaban en un puño hasta volver sus nudillos blancos,— Aceptó la mierda de las personas y me culpo por no ser suficiente para recibir el más mínimo aprecio… Te perdonó la infidelidad, te perdono las mentiras, te perdono todo y te amo Atsushi hasta que mi pecho duele — dijo Akutagawa, Atsushi estaba por decir que jamas volvería a lastimarlo, que le ayudaría para que nunca volviera a sentirse insuficiente, pero una bofetada de Akutagawa detuvo cualquier idea de una disculpa,— No perdono que rompan una promesa, porque significa que no tienen honor o lealtad por algo, aceptó la traición de elegir algo mejor, porque mírame soy un pedazo de porquería, pero no la deslealtad que implica saber que yo moriría por cumplir mi palabra, pero a ti no te importa… — dice con los ojos llenos de lágrimas, sentía que su iba a vomitar, un nudo en su garganta le impedía hablar sin que se cortará la frase, su cuerpo temblaba aun con el calor de la noche,— Soy una mierda, no merezco misericordia por nadie, ni empatía, caridad o amor de nadie, se que soy indigno de todo aquello bueno y honorable, pero hasta la basura como yo merece recibir lo que da… — cada palabra era más insultante que la anterior, pero ninguna contra Atsushi, eran todas contra Akutagawa, quien se sentia tan desechable en ese momento,— Prometiste que me amabas y que yo era especial… Puedo estar con un traidor, un mentiroso, con alguien a quien yo no le importe, un tipo que no pueda ni siquiera amarme, pero no quién rompe sus promesas, con alguien así jamás — luego de ello Akutagawa se fue, no quería excusas, lo único que pidió fue que Atsushi cumpliera su palabra, no lo hizo, ahora aunque le tomará su vida entera lo olvidaría.