Abrí los ojos notando el momento que estaba atado contra una superficie dura. Al mirar frente a mí vi que tanto Naruto como Sakura estaban atados a un tronco y detrás suyo vislumbre a Sasuke, también atado.
—Mierda.
—¿Roger? ¿Ya has despertado?
—Si, Naruto. ¿Qué ha ocurrido?
—Sensei os dio una paliza y nos ha atado a los troncos.
Ante la respuesta de Sakura suspiré. No esperaba que Kakashi se enfadara tanto, aunque también era cierto que la estrategia que había hecho era muy mezquina.
Aparte de que deduje lo que había ocurrido, una vez me quedé inconsciente Naruto y Sasuke se enfrentaron al jounin mientras Sakura no hacía nada. Lo más probable es que ni se resistiera mientras los ataban, demasiado preocupada por la condición de su enamorado.
—Sasuke.
—Hm.
—¿Te puedes soltar?
—No.
Gruñí ligeramente antes de mirar la parte del campo de entrenamiento que podía observar.
—¿Alguien sabe dónde está Kakashi-sensei?
—Se ha ido, dijo que volvería dentro de una hora. Ya habrán pasado cuarenta minutos.
—Mmm, ¿Sakura le has dicho que yo soy el que ha hecho la estrategia?
—No, no lo ha preguntado.
—Entonces no lo digáis. Si ha conseguido calmarse nos hará el dilema del prisionero.
—¿Qué es eso, dattebayo?
—Es algo difícil de explicar pero el resumen es, castigo grave para uno pero ligero para el resto. O castigo medio para todos.
—¿Eh?
—Que si confesamos Roger volverá a la academia, dobe.
—¡Ah, eso sí que no! ¡No pienso permitirlo, dattebayo!
El rubio empezó a patalear, poniendo de peor humor a Sasuke, el cual comenzó a gritarle que se quedará quieto.
—Juro que un día de estos acabaréis con mi paciencia, par de imbéciles.
—¡Imbecil tu! ¡Cállate dobe/teme!
Y siguieron discutiendo. Suspiré e intenté centrarme en encontrar una forma de salir. No podía hacer el sello de manos para el kage bunshin, y aún si lo pudiera no tendría chakra suficiente. La cuerda estaba tan tensa que me era imposible mover mis hombros y brazos. Si al menos pudiera abrir mi porta kunais y agarrar uno.
Mientras lo hacía Sakura empezó a tararear una canción. Fue así como nos encontró nuestro sensei.
—Bueno, niños. ¿Quién quiere comer?
—¡Yo sensei, dattebayo!
Mis esperanzas de quitar la idiotez a Naruto cada día son menores.
—Entonces dime, ¿quién ha hecho el plan?— al momento el rubio callo y desvío la mirada —¿No vas a decírmelo? Pensaba que tenías hambre.
—No lo suficiente como para traicionar a mis amigos.
—Si me lo dices estarás aprobado.
—No.
—Como quieras, no serás genin y tendrás que volver a la academia.
El rubio gruñó varias veces, seguidamente fue hasta Sakura.
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Yo en Naruto
FanfictionSi, he cometido el gran pecado del fanfiction. Pero creo que le he dado un giro bastante orginal. Leed para verlo. Prota no chetado. No hay alteraciones sin sentido en el canon. Esto es solo una forma de satisfacer mis ideas y deseos.