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- ¿Dónde estabas humano?- pregunto enojado el Lord oscuro- ¿Cómo te atreves a hacerme esperar?- gruño tomando del cuello al pelirrojo que sintió como le cortaba la respiración, Gunmar lo arrojo hacia el báculo, Angor Rot miraba todo desde una esquina y no entendía el porque no había aceptado huir con el impuro si Gunmar lo trataba peor que aún perro como lo trataban a el
- no creo que debas ser tan rudo con el- intervino el Trol
- tu cállate, no me das órdenes a mi, yo soy Gunmar el negro
- ¿Por qué defiende al humano señor Rot?- pregunto Usurna con un claro tono de malicia en su voz- ¿Acaso le agrada?- Angor gruño
- no, pero si mata al saco de carne no podremos liberar a nuestra Reyna- Gunmar se acercó al pelirrojo que tosia en el suelo, con una mano lo levanto y lo empujó hacia el báculo
- recita el conjuro- ordenó el Lord oscuro, Usurna se acercó a el dandole un pergamino, Arthur lo tomo y dándose cuenta que estaba en Troles
- mi Troles no es muy fluido- susurro el humano avergonzado
- ¡¿QUE?!- grito el Lord oscuro pero antes de que Gunmar golpeara al pelirrojo unas luces doradas lo rodearon hasta llegar a la cabeza del joven que ahora sabía cómo recitar el conjuro a la perfección
Arthur tomo el báculo con una mano haciendo que la luz verde se tornará roja y con una sonrisa en el rostro recito el conjuro, la luz roja golpeo el cristal, las rocas comenzaron a levantarse y el cristal comenzo romperse, al explotar todo Trol en la sala salió volando
- ¡la noche eterna está aquí!
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Artur y Angor Rot entrenaban entre juegos y risas en la sala de entrenamiento de mercado Trol que usaban para entrenar a los Cazatroles
- jamás lograrás golpearme Rot- se burló el humano esquivando un golpe que el Trol le lanzo- te diré algo, si logras darme haré algo que tú me pidas
- ¿ Por qué te seguiría el juego?- pregunto Angor rodando por el suelo para que el fuego no le diera
- ¿Por qué no?- pregunto el pelirrojo subiendo a una roca cercana- no lo veas como un juego, velo como un reto
