Arco 1. Invierno: Ryujin

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Sakura respiro agitada, el sudor empapaba su cuerpo, cuando lo sintió, con rapidez se agachó y con su pierna estirada dio un giro, esquivando y contratacando con rapidez. En tres días de duro entrenamiento su cuerpo de había adaptado al peso extra y ahora se movía con mayor fluidez.

- Muy bien - elogeo Itachi con una sonrisa en su rostro, Sakura lo miro y asintió dejándose caer al suelo agotada. - ¿Puedo acompañarte hoy? - pregunta sin embargo ante la pregunta en el rostro de la pelirosa explico - Te ayudaré con las compras, no podrás quitarte las pesas, aumentare unos 10klg en cada una.

Y con esas palabras, lo entendió - De acuerdo - acepto mientras se levantaba - me aseare y nos vamos - musito con una mueca en su rostro, esos días lo máximo que había podido dormir era 2 horas, Itachi era un maestro estricto, demasiado exigente y comprometido, sin duda bajo su mando sentía que había mejorado indudablemente.

Entro a la cabaña con cuidado, manteniendo un flujo constante de chackra en sus pies para no destruir la fragil madera con su peso nuevamente. Observó el área que Itachi reparo como pudo, la primera madrugada que entró con las pesas y paso derecho, había tenido que aprender a mantener ese flujo constante incluso cuando dormía, pues cuando se acostó en su bolsa para dormir tuvo otro incidente similar. Camino al interior del baño y cerro la puerta, se retiro las prendas y entro en la ducha abriendo las llaves disfrutando el agua recorrer su cuerpo, lavando la suciedad y el sudor.

Cuando termino se envolvió en una toalla y frunció el ceño, no había traído la ropa para cambiarse. Abrió la puerta y salió encontrandose de gente con el Uchiha - yo... - la mirada de Itachi descendió por su cuerpo lentamente, las mejillas de la pelirosa se calentaron - olvide mi ropa - musito en un tono bajo, el pelinegro se giro dándole algo de privacidad mientras la chica rápidamente iba a la esquina donde guardaba sus pertenencias, escogió rápidamente una muda y regreso al baño para vestirse. Su corazón latía con rapidez y sus emociones estaban alteradas, un revoloteo recorría su cuerpo de arriba a bajo.

Vestía una camisa sin mangas color negro, pegada a su cuerpo, una falda color rojiza con una abertura en su pierna derecha, junto con sus botas. Se miró en el espejo y peinó su cabello, para finalmente salir, Itachi no estaba dentro de la cabaña, se dirigió al exterior y salió encontrando al Uchiha unos metros más adelante, de nuevo frente a la cascada, camino hacia él y se ubicó a su lado también disfrutando la tranquilidad del lugar.

 Se miró en el espejo y peinó su cabello, para finalmente salir, Itachi no estaba dentro de la cabaña, se dirigió al exterior y salió encontrando al Uchiha unos metros más adelante, de nuevo frente a la cascada, camino hacia él y se ubicó a su lad...

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- Debemos bajar antes que se haga tarde - musito la pelirosa, recibiendo un asentimiento. Se dio la vuelta y empezó aquel camino al pueblo que ya se conocía de memoria, unos pasos atrás podía sentir la presencia del Uchiha quien la seguía. Para su incomodidad no intercambiaron palabra alguna, sino al ver la entrada del pueblo y solo para informarle a donde se dirigían primero - se de un puesto de verduras, es todo fresco y a buen precio - comento dispuesta a entablar una conversación, pero el pelinegro solo respondió con un "Hmp".

- Bienvenida señorita - saludo la anciana que atendía el puesto con una sonrisa - hoy me han llegado verduras frescas - le dice.

- Muchas gracias, llevaré unas cuantas cosas - respondió la pelirosa asintiendo leve mientras caminaba por el puesto verificando que iba a llevar, Itachi se quedo afuera viendo hacia el cielo, disfrutando la tranquilidad.

Pétalos Carmesí [Pausada] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora