Cap 12

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POV RAI:

Le envié el mensaje a Alondra, estaba tan excitada, quiero que me toque en este mismo momento, espero no se tarde.

Escuché una respiración agitada entrando al baño, me sentí nerviosa, escuché como decían "Rai, dónde estás", si es Alondra.

Abrí la puerta de mi cubículo y jalé el brazo de Alondra, nos quedamos unos segundos mirándonos, escaneaba cada parte de mi cuerpo, estaba aún más excitada.

Alondra por fin, me dio un apretón en la cintura, pegándome fuertemente a un abdomen, me agarró de la barbilla y me besó, esta vez no fue suavemente como los anteriores, este era fuerte, salvaje, lujurioso.

Alondra separó sus labios de los míos, apoyó su cara en mi cuello escondiéndose, pensé que no haría nada malo hasta de sentí como mordida mi cuello, fue doloroso y placentero a la vez.

Alondra: — Si vamos hacerlo aquí, harás todo lo que yo diga, entendiste? — susurró en mi oído, con su hermosa voz ronca.

Rai: — S-Si Alondra — me puse un poco roja ante sus palabras.

Me agarró de la cabeza, haciendo que me tropezara y fallera frente su short largo que había un gran bulto, Alondra bajo su short dejando ver el gran miembro de Alondra, me sonroje de nuevo.

Agarró otra vez mi cabeza bruscamente haciendo que me sumerja en su pene ya recto, con mi otra mano sujete el pene de Alondra masturbándolo, vi su cara de placer y dolor, tapó su boca para no hacer ruido, no quería que nos encontraran y que nos saquen porque lo estamos haciendo en un baño público. (Mucha información)

Alondra: — Suficiente Rai — empujó fuertemente mi cabeza.

Me levanto sujetando mi cuello, me puse roja al ver su cara, escaneando cada parte de mi cuerpo, admirándolo.

Alondra: — Mastúrbate — ¿Qué? Dije — Como lo escuchaste, dijiste que harías todo lo que yo te diga, que esperas? — no me quedo más remedio que obedecer sus órdenes, esto será difícil.

Me senté en el suelo, bajé mi short, luego mis bragas, no sé cómo haré esto.

Subí mi blusa, dejando ver mis pechos endurecidos, sostuve mi blusa con mi boca, y apreté uno de mis pechos.

Alondra me miraba, con una mirada fuerte que hacía que me diera escalofríos, pero a la vez me gustaba.

Alondra: — ¿Qué esperas? Masturbarte de una puta vez — escuché decir.

Como soy una sumisa de mierda, dominada, seguí las órdenes de Alondra, primero masajeé mi centro, sintiendo demasiado placer.

Alondra: — Hazlo más rápido, no tengo todo tu tiempo — agh, juraba que la mataría.

Y si, lo hice aún más rápido, sentía como unas lágrimas querían salir de lo doloroso que era, metí dos dedos a mi interior, solté un pequeño gemido que fue callado cuando Alondra puso su mano en boca para no hacer ruido.

Alondra — Recuerda que estamos en un baño, no hagas ruido — dijo, solo asentí volviendo a insertar dos dedos a mi centro.

POV ALONDRA:

Me alejé un poco para ver a Rai, es bellísima, sé que estoy siendo ruda con ella, pero no puedo evitarlo, me vuelve loca, cada movimiento que hace, perderé la cabeza en cualquier momento, mi pene se pone recto de nuevo, comienza a palpitar para que lo saque, pero quiero esperar un poco más.

Alondra: — Mete 3 dedos, ahora — digo y desabrochó mi cremallera para sacar mi pene.

Rai obedeció, me encanta que sea tan sumisa, observaba cada movimiento que hacía, metió 3 dedos, no pude resistirme más y comencé a masturbarme, fue tan placentero ver a mi chica obedeciendo cada orden que yo le daba.

Rai: — A-Alon-dra..— escuché gemir mi nombre, vi como comenzaba a sollozar, me satisfacía a un más, quiero verla más así.

Alondra: — Perdón Rai por lo que estoy apunto de hacer — dije mientras veía como masajeaba su clítoris.

Rai: — Perdón de que? — dijo, no respondí.

No me resistí más, fui con ella y introduje mi pene en ella, solo podía ver su cara aturdida y de impacto, claro que esto no estaba planeado, pero esos movimientos que hacía me provocaban tanto que podría follarla todo el tiempo que quisiera.

Abrí a un más sus piernas, y la embestí una y otra vez, parecía un lobo hambriento, en cualquier momento Rai no aguantaría más, pero no me importó, con mi mano derecha tape su boca, estaba haciendo demasiado ruido, me levanta y me senté, sentando también a Rai en mi pene.

Rai: — Agh, t-tenias que hacerlo m-muy f— la calle con una embestida bruscamente, gruño un poco.

Sus nalgas rebotaban en mi pene, metí mi lengua a su boca ahogando un gemido que se aproximaba, lágrimas comenzaron a caer por sus mejillas, me excito a un más viéndola así, me descontrolé y la embestí más rápido de lo normal, dejó bajos gemidos cada vez que la embestía.

Mordí su cuello haciendo un gran chupetón, solté un gemido leve y ronco en el odio de Rai, observé como su cuerpo se tensaba ante mi ronco gemido, pasó sus brazos por mi cuello sujetándose.

Rai: — Alondra, no soportaré más, me vendré en cualquier momento — susurró, pero no me importó, al contrario, lo hice aún más fuerte provocándole el orgasmo.

Escuché unos pasos que se acercaban, rápidamente acomodé a Rai, haciendo como si estuviera sentada en el inodoro.

Valentina: — ¿Rai? Estás aquí? — al carajo ¡Jodete Valentina! Pensé.

Cualquier error que tenga, háganmelo saber.

DETRÁS DE CÁMARAS (G!p)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora