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𖦹 𖦹 𖦹
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HOY ERA UN día muy especial, porque entrarían familiares de los participantes que quedan en la casa de gran hermano. Dejaron último a Bautista. Lo mejor para el final, ¿no? Todos saben cuánto el chico extrañaba a su novia, Ariana. De hecho, cuando el uruguayo vio que entraban también las parejas, no podía dejar de pensar que posiblemente también pueda venir su pareja. La extrañaba un montón. Nunca había dejado de pensar en ella.
Ellos se conocieron hace casi cinco años, cuando la chica viajó para Uruguay por un cumpleaños que tenían en común. Desde ahí la conexión que tenían era increíble, y también desde ahí no se querían dejar de ver.
Ari acompañó en todo el proceso de casting, apoyándolo, como siempre, a Bautista. Siempre estuvo muy orgullosa de él, y ahora más al ver que estaba llegando tan lejos. Le encantaba verlo, y le gustaba su manera de jugar tan limpia.
Por fin, en el último congelados de las familias, ella entraba para decirle lo tan orgullosa que está ella de él, y poder besarlo, aunque él no pudiera corresponder.
Antes de entrar a la casa, miró la pulsera que Bauti le regaló hace unos años, esa que siempre llevaba. Que tanto le recordaba a él. De ropa se puso el vestido azul marino con el que se conocieron, también. Quería recordar con todo ese momento tan lindo, que abrió tantas cosas.
Y ahí, empezó el congelados.
El chico no dejaba de mirar la puerta donde ella entraría. Le habló al chino, que estaba justo al lado de él.
-¿Vos decís que entre hoy mi familiar?
-Seh, seguro. ¿Querés que entre Ari? -le sonrió al amigo.
Él asintió, con una pequeña sonrisa al recordarla.
-Obvio. Yo amo a mi familia y todo, ya sabes. Pero a Ari la veía todos los días en todo momento. Creo que es normal extrañarla más a ella que a otros.
El chino asintió, en acuerdo con él.
Y fue justo cuando sonó la alarma para que se queden congelados, que Bautista supo que era su turno (ya que era el único que no pudo ver a su familiar).
