ʀᴇᴜɴɪᴏɴ ᴅᴇ ᴛʀᴀʙᴀᴊᴏ

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Estaba corriendo apurado, pues estaba llegando tarde a su reunión totalmente importante con el "matra", jefe de la empresa y famoso por ser un gran hombre

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Estaba corriendo apurado, pues estaba llegando tarde a su reunión totalmente importante con el "matra", jefe de la empresa y famoso por ser un gran hombre.

Entró apresurado y cerró con lentitud, suspiró y dirigió su adorable mirada al albino que lo esperaba con la cara seria. Al parecer, al jefe Cyno no se le había tomado bien que Tignari llegase 3 minutos tarde.

― Llegas tarde. ― Presionó su puño, relajando la mirada.

― Lo lamento jefe, estaba muy ocupado atendiendo unos clientes en recepción, olvide completamente nuestra reunión. ― Hizo una leve reverencia, dando las disculpas necesarias.

― Bien, sabes por qué te llame aquí, no es así? ― Tignari elevó sus orejitas, curioso observó el papel asignado por Cyno para Nari.

― Umm.. ― leyó con atención. ― Un aumento considerable del monto mensual. ― respondió finalmente, siendo exacto en sus palabras.

― Exacto, me gustaría darte un aumento debido a que tu trabajo está siendo considerablemente excelente y tu esfuerzo merece una recompensa correcta. ― Pudo ver como la cola de Tignari delataba su felicidad.

Aunque poco lo mencionaba, la madre de Tignari ha estado enferma durante meses y Tignari a pesar de tener grandes conocimientos en medicina no ha podido encontrar una cura casera, obligándolo a comprar una inyección con el costo de mas de doscientos mil pesos. Con el aumento, su madre podría estar salvada, ganaba ya veinte mil mensuales y poco llevaba trabajando ahí, ahora según Cyno serían setenta mil mensuales, más los ochenta mil ahorrados podría comprar la medicina.

― Qué debo hacer para conseguir ese aumento jefe? ― Cyno titubeó algunas palabras incomprensibles, pero luego tosió dejando aquellas palabras en nada.

― Ahem, yo estoy proponiendo una hora extra en tu hora, solo eso. ― Al oír la gran propuesta, Tignari no pudo evitar demostrar su emoción, tanto en su cola como en el brillo de sus ojos.

― Por favor, haré lo que sea! ―

― Lo qué sea? ― Dirigió su mirada al piso, sonriendo levemente.

― Sí, lo que sea. ― Murmuró.

― Ven a verme el sábado, a las 14:00hrs. ―

Tignari accedió y se marchó, Cyno aún con la mirada baja, miró un cuadro en su escritorio, donde aparecía el y su adorable esposa, suspiró y bajó el cuadro, dejándolo boca abajo.

― Ya no te amo, Nilou. ―

Llegó el día mas deseado, el día sábado, que Cyno supiese, Tignari era soltero y jamás en su vida había tenido pareja, había vivido su vida soltero debido a su particular problema

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Llegó el día mas deseado, el día sábado, que Cyno supiese, Tignari era soltero y jamás en su vida había tenido pareja, había vivido su vida soltero debido a su particular problema.

" Los zorros fenec una vez que elige a una pareja, se mantiene fiel a ella de por vida. ".. Eso significaba que si Tignari escoge a su pareja, estará inconscientemente atado a él por el resto de su vida, es como un pequeño amarre que se hace él mismo.

Y si, Tignari estaba enamorado de su jefe, el hombre que le habla diariamente, el que comparte una extraña amistad, el que hace bromas incoherentes y estúpidas. Ese hombre amaba.

Se acercó a su sitio de trabajo y dejo sus cosas, a pesar de que era fin de semana era totalmente ordenado y perfeccionista, era jodidamente perfeccionista, incluso para sus gustos, al elegir a tal.. tipo.

― Buenas tardes, Cyno. ― Saludó cordialmente, agachándose en una reverencia para el mayor.

― Buenas tardes, Tignari. ― Sonrió, pocas veces lo hacía, algo que valía la pena admirar durante los pocos segundos que duraba.

Ambos eran tipos serios, jamás se mirarían con picardía, verdad?

Tignari se sentó frente al mayor, con sus piernas inquietas miro fijamente al mayor, quien lucía intimidante ante tal chico.

― Bien, sobre el aumento.. ― Suspiró Cyno. ― Te lo daré, subiendo tu salario de veinte mil a cuarenta mil. ― Sus ojos brillaron de emoción, todo iba a mejorar e incluso más de lo que imaginaba.

― Si?, muchas gracias! ― Agradeció, juntando sus manos y haciendo una reverencia.

― Escuchame Tignari. ― Habló seriamente, cambiando su tono drásticamente.

― Uh..? ― El menor le dirigió la mirada, con una sonrisa en sus labios.

Tenían que aceptar que ambos se deseaban, era la oportunidad perfecta para Cyno para al menos intentarlo, no podía desperdiciar tal posibilidad.

― Mira.. se que nos somos mas que jefe y empelado pero, me gustaría.. ― Su corazón estaba latiendo a mil, podía sentirlo.

― Ah..? ― Intentó contestar, pero no salían mas que balbuceos incoherentes.

― que seamos amantes. ― Dijo en corto, alterando al pelinegro. Sus mejillas se sonrojaron, sentía su piel caliente más sus orejas que tiritaban nerviosas.

No sabía como, su piel estaba llena de chupetones y mordidas perversas, dejadas por Cyno

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No sabía como, su piel estaba llena de chupetones y mordidas perversas, dejadas por Cyno. Sus muslos siendo constantemente apretados, acercándose a su entrepierna de a poco.

― C-Cyno.. ― Jadeó, mientras levantaba inconscientemente la cabeza para seguir disfrutando de las lamidas y chupones de parte del contrario.

― Qué pasa? El aumento de salario no es suficiente? ― Presionó violentamente su pierna, abriéndola e incapacitando al menor de hablar.

― U-Ugh! Si.. p-pero-..― Arqueó la espalda y soltó un quejido agudo cuando las manos del albino se intrometieron en su miembro, claramente ya erecto.

― No sabes lo mucho que deseaba esto. ― Frenó un poco, para verlo a los ojos. ― ¿Tú también lo deseabas? ― Sus ojos se relajaron y sonrió suavemente, Tignari asintió.

Ambos se deseaban.

El amor era mutuo, era definitivo. ― Q-Qué hay de tu esposa..? ― Murmuró Tignari, entre gemidos.

― Ella ya no vale la pena. ― Susurró, mirando los verdes ojos del pelinegro.

Se quiso sentir amado, y finalmente lo había logrado, quien lo amaría más que Cyno?..

Exacto, nadie.

Exacto, nadie

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⏰ Última actualización: Jun 01 ⏰

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Reforzando la amistad || Cynonari (One shots)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora