Las tres personas en su cocina se vieron entre si, pero cada una de forma diferente; Vegas con la seguridad que se caracteriza entornó los ojos hacia sus amigos, Khun cruzó sus brazos de forma teatral y Porsche... bueno Porsche abrió la boca de la sorpresa. – Mheeeee con razón no respondías al celular. – Ese fue Porsche quien era el más atrevido, curiosamente Khun estaba muy callado.
Aunque Pete tuvo algo de tiempo para ponerse una bata encima antes de salir a abrir la puerta, Vegas al parecer no pudo encontrar nada y solo llevaba puesto una toalla que nada hacía por cubrir su cuerpo esculpido de músculos. Caminó con paso firme hacia donde Pete se encontraba con aspecto de querer que la tierra lo tragara, "bien por ti cariño" Vegas sonrió para sus adentros, había visto un par de veces a los amigos de Pete y sabía quién era quien, también sabía que su hermanastro estaba sospesando que hacer a continuación, no le importaba, de todas maneras debían acostumbrarse a verlo cerca de Pete de ahora en adelante, había encontrado al omega que era su complemento en todos los aspectos y no pensaba dejarlo ir.
Depositó un beso en la mejilla sonrojada de Pete y fue a buscar la cafetera para prepararse algo de café, lo iba necesitar. Vegas no estaba en su casa, pero se movió por la cocina con tal familiaridad que Pete reaccionó en ese momento. – Déjame te preparo algo. – Dijo Pete olvidando a sus amigos.
- Bien nos vamos, estamos de más aquí. – Porsche habló y tomó a Khun de la mano para irse. – Habíamos traído desayuno, pero pueden comerlo ustedes, nos vemos Pete, Vegas.
Khun seguía sin pronunciar ninguna palabra y solo se dejaba arrastrar por su amigo. Sabía que pronto pedirá explicaciones, siempre era así.
- Tus amigos son... interesantes. – Vegas ya había puesto el café en la maquina y Pete tomó la comida que sus amigos trajeron para servirla en platos.
- ¡Ja! Eres demasiado amable con ellos, son especiales. –
- Puedo ver que los amas y te aman igual. –
- Así es, Porsche es el alma de fiesta donde quiera que va, siempre atrae compañía masculina y Khun... pues Khun está a otro nivel de locura. –
- Anoche ¿les dijiste que escaparías conmigo? – Vegas observaba a Pete moverse solo con la bata que llevaba puesta, sus piernas blancas sobresalían y su cuello de cisne le invitaba a besarlo de nuevo, seguramente su cuerpo estaba lleno de marcas de anoche, le encantaría ver todo eso a plena luz del día.
- No, solo les dije que me iba... ¿Qué? – Pete se dio la vuelta y pilló a Vegas observándolo.
- Nada, solo imagino como se ve todo por debajo de esa bata. – Pete se sonrojó, era adorable.
- Ven, vamos a comer. –
- Ya te comí a ti. –
- Hablo del desayuno. –
- Y yo quiero volver a comerte. –
- Eres muy atrevido ¿lo sabes? –
- Por supuesto. – Afirmó Vegas y Pete solo movió la Cabeza en negación.
El desayuno estuvo lleno de risas y charla, hablaron para ponerse al día de todo mientras no pudieron verse, de las expectativas de sus trabajos y sobre... – Phayu es un niño dulce, pero protector, las pocas veces que lo he visto se mantiene firme. – Pete permaneció en silencio un momento. - ¿Pete? –
- Oh si, Phayu es un niño dulce, pero no le digas eso o hará un puchero. –
Pete se levantó de la mesa y fue al fregadero, dejó los platos y comenzó a lavarlos. Vegas se colocó a su lado para ayudarle. – Déjame hacerlo. – Al ver que Pete iba a protestar, tomó un paño y comenzó a secarlos.
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Recuérdame
FanfictionRecién divorciado y con un hijo, Pete conoce a un enigmático alfa y durante una noche se pierde en el deseo y la pasión que nunca tuvo con su exesposo, una noche que para Pete será de las que no se deben repetir, sin saber que el alfa con quien pasó...