Narra Yang Mi.
La vida en el cuerpo de Amairani resultaba bastante fácil y menos superficial. Me costó muchísimo aprender su idioma pero con la ayuda de la mejor amiga de Amairani o como ella me decía, Amy resultó menos complicado.
Me gustaba la vida de Amairani, no había tanto drama, era sencillo vivir su vida, solo era ir a la escuela, hacer tareas y salir de vez en cuando con Ariadne. Lo único que no me gustaba mucho hacer era lavar los trastes y lavar mi ropa. Ella había notado que por alguna razón su mejor amiga ya no le compartía cosas sobre su grupo favorito y cuando me vino a enseñar el mensaje que la verdadera Amairani le había mandado desde su cuenta personal de Facebook no me quedo de otra que confesar que efectivamente, era una farsante en el cuerpo de su mejor amiga.
Hubo un principal motivo por el que hice todo esto, este cambio de cuerpo pero creo que podría quedarme todo el tiempo que quiera. La familia de Amairani era de clase media, pero aunque podría faltar los lujos en que vivía antes, la atención que me daba la madre de Amairani era tan reconfortante para mí. Por unos momentos a veces fingía que la que me daba los abrazos y palabras de aliento era mi madre. Supongo que si quiero puedo seguir esta farsa hasta que tenga suficiente.
Comencé a cuidar más el cuerpo de Amairani, ella no era tan deslumbrante o llamativa a los demás al parecer porque cuando entre el primer día de clases, ningún chico se fijaba en mi como usualmente harían en mi propia yo. Tuve que mejorar varias cosas, pero supongo que si voy a vivir en este cuerpo debería tratar de hacerlo a como me gustaría que fuera y como no tenía prisa, ya que en mi planes más próximos no quería regresar a mi verdadero cuerpo tendría mucho tiempo para transformarlo en la mejor versión física de Amairani.
Rutina de ejercicios, planes de alimentación y encontrar el estilo, ropa y maquillaje que iba mejor con Amairani. Si algún día vuelve a su cuerpo, Amairani me lo agradecerá. Lo sé.
Me coloque los guantes para lavar los trastes, la piel de Amairani era sensible así que estaba tomando esta costumbre. A veces me preguntó que dirían mis padres si me vieran haciendo esto, creo que les daría algo.
Mi teléfono, bueno el teléfono de Amairani comenzó a vibrar. Deje los guantes en el trastero, camine hacia la sala y tome el teléfono que había dejado en la mesita de centro de la casa. Respondo la llamada.
“Hola Amairani, soy Sebastián.”
Sonreí, ese compañero de escuela de Amairani era uno de los lindos. Había muchas chicas que le seguían, no se si Amairani también pero Ari le tenía algo de apatía a Sebastián. No comprendo por qué. Supongo que algo paso entre ellos o ¿Sebastián le hizo algo a Amairani? Supongo que hay que andar con cuidado con este chico.
“Hola Sebastián” Respondí
“Vaya, que encantadora voz.”
“Gracias por el elogio pero ¿Necesitas algo Sebastián?”
“No agradezcas linda, me gustaría preguntarte si te gustaría estudiar mañana conmigo en mi casa, ya sabes es sábado, fin de semana—escucho su risa—y tenemos nuestro primer parcial el lunes, creo que me vendría bien la ayuda de alguien tan inteligente como tú.”
“¿Es una cita o es solo estudio?”
“Puede ser lo quieras, pero supongo que también querrás estudiar.”
“Dejemoslo en estudio. ¿En donde te veo?
“Supe de tu amnesia ¿Segura que recuerdas bien la ciudad?”
“Si te soy sincera solo sé como llegar a la escuela.”
“Ire por ti a tu casa ¿Te gusta la idea? ”
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My I [Enhypen-Fanfic]
FanfictionDesde ese día en que desperté después de un largo coma no me imaginé que los chicos que tanto idolatraba fueran a formar parte de mi día a día. Cuando después de golpearme la cabeza y terminar en el cuerpo de otra chica que lo tiene todo, dinero, ta...