§🧡Experimento 508🧡§

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Hay San Valentín, el día de los enamorados, donde todo el mundo disfruta de un tiempo con sus parejas o con sus amigos si es que está soltero.

San Valentín no es solo el día del amor si no también de la amistad y todo el mundo debería celebrarlo con alguien si es que puede.

Aunque también puede llegar a dar una sensación de amargura al ver a tantas parejas felices disfrutando de su compañía cuando tú no tienes a nadie con quién compartir ese tipo de momento.

Ser soltero tiene sus ventajas pero el día de San Valentín es el peor para una persona sin pareja.

Aunque este San Valentín iba a ser diferente para nuestras dos chicas.

14 de febrero

Natalia ya estaba mejor. Le habían dado el alta y ya está casi recuperada de aquella pelea.

La espalda la tenía casi curada del todo además de que había tenido la suerte de que no le iba a quedar cicatriz así que estaba más que contenta con la noticia.

De hecho la medicina que se estaba tomando le estaba yendo muy bien y seguramente pueda dejar de tomarla en unos pocos días.

Para la desgracia de las dos muchachas les tocó una charla muy intensa con los padres de Victoria sobre lo ocurrido.

Les pidieron detalles de todo para poder ver si podían poner una denuncia a Lucas y aunque no las regañaron mucho si que sintieron cierta decepción hacia Natalia que ella comprendió y entendió sin quejarse. De igual manera no las castigaron a ninguna de las dos ni mucho menos se enfadaron con Natalia tan solo le dijeron que no lo hiciera de nuevo o que si hacía que estuviera un pelín más pendiente, al final ella había sido la más afectada así que mucho no le podían pedir.

En cuanto al instituto, había tardado bastante en volver, quería estar del todo recuperada pero aún así sus amigas fueron a verla para hacerle compañía. De igual manera ya hacía un par de días que había vuelto a él.

Por la mañana fue a clase sin Victoria porque según le había contado su madre que no iría las tres primeras horas porque tenía médico y que después de eso, sí ella quería, la podía recoger y Natalia aceptó.

Estaba contenta, no había muchas ocasiones en las que pasará San Valentín con pareja porque por lo general o la tenía después del día o terminaban antes.

Al llegar pensó que estaría Juan esperándola con flores o algo pero no le vio por ningún lado y al acercarse al grupo de sus amigos para preguntar por él y le dijeron que había ido a comprar algo y que volvía a la salida.

Natalia no se preocupo y siguió su camino hasta su primera clase.

En su instituto el día de San Valentín se celebraba de una manera diferente. Un par de días antes organizaban un comité donde varios alumnos de varios cursos se ocupaban de repartir rosas o de organizar sorpresas a los alumnos.

Lo único que tenías que hacer era ir y decir el nombre y lo que quieras que le llegara en el caso de querer regalar una rosa o decir el nombre y esperar afuera en el caso de las sorpresas.

Por lo general las sorpresas eran a la salida. Uno de los alumnos venía a por ti y te llevaba a la salida donde te espera tú pareja o alguien que se quería declarar.

Natalia veía a un montón de chicas con flores en la mano o leyendo cartas de forma muy animada y aunque a ella no le iban tanto esas cosas también le gustaban y esperaba que Juan le hiciera algo parecido.

Parada frente a su taquilla la pelinegra estaba cogiendo el libro de la siguiente clase hasta que sintió un toque ligero en el hombre

-¿Ocurre algo?- preguntó al ver a un muchacho parado frente a ella