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24 de febrero del 2010

Había pasado más de una semana desde el día de San Valentín sin ninguna novedad entre las dos.

Las clases estaban tranquilas al igual que sus tardes, por el momento no había nada que las preocupara.

Natalia había dejado a Juan dos días después cuando en una fiesta le pilló engañándola con una de su clase pero como la pelinegra no es rencorosa solo se acostó con su hermano.

Hoy, Sábado, Victoria y Natalia estaban en el centro de PR en busca de unos vestidos para la boda de los padres de Natalia en la cual estaría también Victoria porque su familia era casi como la suya.

Aunque en PR no solía hacer frío el día de hoy estaba algo nublado así que iban con chaquetas por si llegaba a llover en algún momento.

Natalia no tenía una idea clara de lo quería ponerse pero si que sabia que no podía ser algo muy pegado y expuesto porque estaría toda su familia. Por otro lado Victoria se cogería un vestido largo con falda de vuelo del mismo color que el de Natalia para ir conjuntadas

-Hay un montón de gente puñeta casi no se puede ni andar- Natalia estaba ligeramente agobiada, odiaba los sitios con tanta gente aunque Victoria no se quejaba porque iban de la mano para no perderse

-Pues es sábado, mucho no puedes pedir yo te dije de ir ayer por esto mismo pero no me hiciste ni caso-

-Que ayer no podía, tenia entrenamiento de boxeo- y digamos que tuvo otro encuentro con el hermano de Juan pero eso Victoria no lo sabía

-¿Cuándo tienes el siguiente combate?-

-De momento estoy descalificada...-

-¡PORQUE!- grito Victoria

-A eso iba pero me has interrumpido. Le tuve que contar a mi entrenador sobre lo del coma y me comento que por mi salud estaría fuera de los combates hasta nuevo aviso-

-Pues vaya, yo quería ir a verte otra vez- aunque para que mentirnos, si pasaba lo mismo que la última vez en el vestuario Victoria no se iba a quejar

-Otra vez será, tengo que preguntar al médico si puedo, pero bueno de momento estoy bien-

Siguieron caminando entre la gente hasta llegar a la primera tienda. La primera que entró a probarse cosas fue Natalia

-¿Y bien?-

Victoria la miró de arriba abajo con la boca abierta ¿Será que le podrá pedir que lo lleve siempre puesto? El vestido era azul claro, largo, con una abertura en la pierna derecha y los hombros caídos con un poco de escote pero no demasiado

-Te ves increíble- soltó de golpe Victoria sin pensarlo mucho

-¿Enserio?- ella se dio la vuelta para verse mejor en el espejo -A mi no me convence-

-Coño mami ¿y ese culo?- pensó Victoria aunque volvió en sí al instante -A mi me gusta-

-Pero es como muy simple no se, la parte de arriba me encanta pero en si el diseño se me hace muy simple y se me sale del precio-

-Eres tu quien lo va a llevar así que tu decides- Natalia suspiro y se volvió a meter al probador a probarse el siguiente.

Victoria miraba su móvil mientras esperaba a Natalia para poder puntuar el vestido que se pudiera aunque el primero le había gustado y mucho

-También esta este rojo pero es más complicado conseguir uno del mismo color para el tuyo- Victoria retiró lo que antes había pensado, el rojo era mucho mejor que el anterior.

§🧡Experimento 508🧡§Donde viven las historias. Descúbrelo ahora