Resaca

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A la mañana siguiente, Anika comenzó a abrir los ojos lentamente.


Sus pupilas se dilataron al recibir la luz solar.


Con suaves y femeninos quejidos, estiró los brazos y poco a poco comenzó a recuperar la conciencia.


Sus ojos exploraron el entorno y notó de inmediato que no estaba en su habitación. Confundida y un poco aturdida por la situación, se levantó de la cama con cuidado, tratando de recordar lo que había sucedido la noche anterior. 


Colocando los pies en el suelo, caminaba por la habitación, buscando alguna pista que le ayudara a entender dónde estaba.


Al observar las fotografías, pertenencias y que incluso ella estaba vestida con una camisa de hombre, comenzó a sentirse nerviosa y espantada.


—¿Q-Que?...


Decidió entrar al baño para lavarse la cara y despejarse un poco.


Sin embargo, al abrir la puerta, se encontró con Hunter, quien estaba terminando de ducharse y se preparaba para el día. Anika se detuvo en seco, sorprendida y confundida al ver al joven. Sus mejillas se encendieron de repente, y su mente comenzó a divagar por los posibles escenarios de lo que podría haber pasado la noche anterior mientras estaba ebria.

La vista de Hunter con la toalla a la cintura y el vapor del baño creando una atmósfera aún más tensa, fue suficiente para que Anika sintiera un escalofrío de incomodidad recorriendo su espalda

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La vista de Hunter con la toalla a la cintura y el vapor del baño creando una atmósfera aún más tensa, fue suficiente para que Anika sintiera un escalofrío de incomodidad recorriendo su espalda. Con un grito ahogado, retrocedió un paso, sus ojos tornandose enormes de incredulidad y temor.


El al notarla, trató de calmarla antes de que pensara lo peor.


—Anika, tranquilízate por fav...


—¡¿Hunter?! —Exclamó Anika con voz temblorosa por la confusión y el miedo repentino que la invadía. La idea de que algo inapropiado hubiera sucedido la noche anterior mientras estaba bajo los efectos de la droga la llenaba de pánico, y la presencia del chico en esa situación solo aumentaba su ansiedad.


Hunter levantó las manos en un gesto tranquilizador y dio un paso hacia ella, con una expresión llena de preocupación por la chica.


—Anika, tranquila, todo está bien. No pasó nada. —Aseguró Hunter con voz suave pero firme, tratando de transmitirle calma mientras se acercaba lentamente.

The Bad Batch: Realidad alternaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora