In The Name Of Love (T3)

Capítulo 15.

Poseidon POV
El día de clases para nuestros hijos había terminado, observaba a mi hijo Percy salir del instituto hablando con su novia Annabeth mientras se dirigían a su edificio de apartamentos.
– Padre deja de observar a Percy él esta bien – dijo mi hijo mayor, me voltee a verlo.
–  Solo me aseguro de que todo alla ido bien – dije.
— Vamos ya sabe cuidarse solo no sera para tanto – dijo Triton rodando los ojos, este niño a veces me saca de mis casillas.
– En realidad con el problema de la niebla desaparecida es un riesgo que ellos esten ahí fuera – le recorde.
– Pero no es nada que no hayan podido manejar antes – repuso Triton.
– Y no digo que no tengas razón en eso hijo – le dije.
– Tu padre solo esta preocupado Triton es normal que quiera saber como esta nuestro Percy ‐ dijo mi esposa.
– Gracias por apoyar querida – le dije.
- Yo no veo que la desaparición de la niebla este siendo un problema - dijo Tritón - parece que lo están llevando bastante bien - insistió.
- Lo se, pero podrían descubrirlos y no podemos permitir que eso llegué a ocurrir - recordé de brazos cruzados.
- Solo queremos protegerlo no queremos que le suceda nada - dijo mi esposa a mi lado con claro tono de preocupación en su voz, la abracé por los hombros para tratar de asegurarle de que todo estaría bien, pero ni siquiera yo mismo estaba seguro de eso.
- Madre, padre se que quieren proteger a Percy - comenzó a decir nuestro hijo mayor - Pero debéis dejar que esto lo haga él solo - explicó - Ya no es un niño, ni él ni sus amigos lo son - insistió - entiendo porque queréis que se mantenga a salvo, nadie quiere que la historia vuelva a repetirse, sin embargo, no podemos evitar lo que pueda pasar - en ese momento de me ocurrió la idea perfecta, había visto al tutor de clase de Percy y sus amigos, su nombre era Paul Blofis, pero yo ya sabía quién era desde antes enterarme que sería el profesor de mi hijo.
- O tal vez si - dije.
- ¿A que te refieres con tal vez si? -preguntó Anfitrite viéndome confundida.
- Enseguida vuelvo - le respondí.
- Pero ¿A dónde se supone que vas ahora? - preguntó mi esposa sorprendida.
- Iré a hacer un pequeño recado luego te lo cuento - respondí.
- Poseidón no hagas ninguna locura - me advirtió pero yo ya no la escuche, rápidamente, salí de mi palacio en el mar y subí a la superficie. Me disfrace de mortal, para que los humanos no me notasen y me dirigía al instituto donde estudiaban mi hijo y sus amigo. Sabía que está era la hora en que los profesores salían de la escuela era la oportunidad perfecta para hablar con Paul. Lo vi salir junto con el resto de sus compañeros hacía el aparcamiento y me encaminé hacia él cuando se acercaba a su coche.
- Disculpe, ¿Es usted el profesor Paul Blofis? - pregunte, el hombre se volteo frente a mi sorprendido.
- Si, ¿le conozco? - me preguntó confundido, supuse que no me había reconocido por mi disfraz de mortal así que no le di importancia.
- Verá soy el padre de Percy Jackson y me preguntaba si podría hablar en privado con usted, mi hijo me dijo que era su tutor - explique.
- Pues si, así es y también su profesor de literatura - me dijo Paul - Y claro ¿De que quiere hablar exactamente? - me preguntó.
- Venga conmigo, se lo contare mientras damos un paseo -le dije, Paul asintió con la cabeza y me siguió mientras comenzábamos a caminar.
- Bien ¿Qué es lo ocurre señor Jackson? - me preguntó cuando llegamos a un parque cerca de la escuela y me asegure de que nadie nos pudiera ver o escuchar.
- ¿Todavía no me reconoces Paul? - dije transformándome en mi forma griega de dios del mar sin mostrar mi forma real.
- ¿¡Señor Poseidón!? ¿Qué esta haciendo usted aquí? - preguntó sorprendido cuando supo que era yo.
- Es bueno verte de nuevo amigo mío - le dije.
- Entonces su hijo Percy es.....- no termino la frase, pero sabía lo que iba a decir.
- Si, es un semidios al igual que la mayoría de los alumnos nuevos que entraron hoy a la escuela, de hecho venía a hablarte sobre ellos - le respondí.
- ¿Qué pasa con ellos? ¿Hay algún problema? - preguntó Paul confundido.
- Digamos que si - respondí - Verás como sabrás cuando los semidioses cumplen 17 años, son enviados al mundo mortal para que aprendan a vivir entre mortales - comence, Paul solo asintió - Recientemente descubrimos que la niebla que hace que vosotros los mortales seáis ajenos a nuestro mundo a desaparecido de forma extraña, no sabemos como a podido ocurrir - le conté, Paul se rascó la barba.
- Y supongo que eso supone un problema para los semidioses y todo ser mitológico si llegan a descubrirlos - dijo Paul serio.
- Exacto - afirme - Por eso necesito que los vigiles en todo momento, todos los dioses tememos que si los descubren nuestros hijos corran peligro y no queremos que eso ocurra, tú eres uno de los pocos mortales que saben de su existencia y bien sabes que eres uno de los miembros de la organización que se encargó de protegerlos todo este tiempo y es importante que ellos estén a salvo - explique.
- Lo entiendo, no podemos permitir que les pase algo, sin ellos el mundo llegaría a su fin - dijo Paul.
- Se que te estoy pidiendo demasiado pero no conozco a nadie más cualificado que tú para cuidar de ellos - le dije.
- Lo se, y no te preocupes, todos estarán a salvo - me aseguro - Me asegurare de que no les pase nada - prometió.
- Sabía que podía confiar en ti - dije.
Continurá.......................................................