ꜱᴛᴀʏ ᴀʟɪᴠᴇ ||Maitake||

Capitulo X

—Takemitchy —Mikey habló haciendo que girará hacia él solo pudo ver como sonreía con el celular en su rostro.

—Te ves lindo.

Mikey disfrutaba de tomarle fotos desprevenido y luego enviárselas por mensaje riéndose o poniéndolas en su perfil de contacto. Takemichi disimulaba mejor, aprovechaba que su atención estaba en otras cosas y capturaba esos momentos en donde le parecía tan único y feliz.

Pasearon un rato por el lugar donde se contaba que era cuidado por lobos, al final si era un lobo y no perros como habia pensado Mikey por un momento. Se estaba haciendo tarde y Takemichi podía notar que las baterías de Mikey estaban dando lo posible por seguir de pie.

—¿Quieres irte? —Pregunto Takemitchy, Mikey bostezo asintiendo.

—¿Te divertiste?

—Si, gracias y más por esto—Takemichi antes de que Mikey reaccionará acerco el celular tomando una foto de ambos.

Mikey lo estaba mirando a él pareciendo muy tierno mientras Takemichi veía el teléfono.

—No tenemos tantas fotos juntos.

—Deberíamos llenar el celular con fotos nuestras. ¿Eso es lo común no?

—Si, a veces.

Oh.

Mikey se quedó pensando unos segundos antes de volver a bostezar.

No aguantaría mucho si tardaban en llegar al coche, tendría que cárgalo Takemichi y posiblemente haría un mal papel llevándolo por esas escaleras. La noche habia caído y entre tantos arboles parecía solo resaltar las cabañas y el camino de luces del lugar.

Andar entre los árboles podría causar una sensación de desorientación, la noche en el bosque podría ser tétrica. La cena habia sido traída hace un par de minutos sin embargo Takemichi no tenía el corazón de levantar al chico hecho un ovillo en la cama, su cabello era un desastre entre las cobijas.

Pensó que sería mejor comer y después esperar a que despertara.

Metió la comida en el microondas haciendo que el aroma invadiera todo el lugar sintiendo como su estómago pedía comida. El estómago de Mikey dolió cuando un aroma se filtró por su nariz, abriendo un ojo lentamente y se dio cuenta donde estaba. Rodó por la cama sintiéndola demasiado grande, y se levantó en seguida.

—¡¡Huele a Katsudon, aaahhhh tengo tanta hambre!!

Takemichi se rio para sí mismo, por un momento pensó que podría levantarlo si olía la comida más nunca pensó que inconscientemente funcionaria.

—Se está calentando si no vienes me la terminaré y comerás solo arroz.

—NO!! Te molestaría toda la noche si me haces eso—Bajo de la cama descalzo corriendo hacia la cocina.

Mikey tenía una pijama que lo hacía ver más pequeño de lo que era y su cabello estaba en todas direcciones.

Causando una risita en Takemichi.

—Dormiste bien, se nota.

—Si dormí de maravilla por un momento pensé que estábamos en la casa, esa cama es maravillosa necesitamos llevárnosla y cambiarla.