○Diez○

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- Cuando MinHo me dijo lo que le habías dicho a tu madre, no podía creerlo, cielo...- YoonGi dijo mientras limpiaba sus manos en el trapo de cocina. JiMin estaba cuidando de que Kookie no se lastimara con ese nuevo juego que YoonGi le había enseñado. JungKookie estaba entretenido dando pequeñas volteretas, colocaba sus manitas en la alfombra y trataba de alzar las piernas.

- Ni yo sé de donde pude actuar así...- mencionó riendo y aplaudiendo cuando JungKookie logró dar una vuelta de estrella casi perfecta.- Fue gracioso ver su cara llena de enojo...

- ¿Crees que haga algo extraño?- YoonGi preguntó volviendo a la cocina. JiMin sabía que a esas alturas su madre ya había hablado con su padre, de seguro estarían haciendo algun tipo de preparación para su supuesto regreso.
YoonGi apareció con la bandeja de comida y la colocó en la mesita de centro, JiMin detuvo a su hijo para evitar a algun accidente.- Cuidado, galletita...

JungKookie se quedó quietecito en la misma posición, con sus piecitos y manitas en el suelo, listo para dar otra vuelta.

- JungKookie...- JiMin lo tomó por la cintura y lo levantó, su pequeño ríe y se deja hacer por su padre.- Hay que comer, mi amor...

JiMin mira a YoonGi, su esposo sirve la comida y JungKookie se acomoda sobre las piernas de su papi, a veces le gusta comer solito, pero hoy quiere que lo mimen mientras cenan.

- Ya me imagino lo que está planeando...- JiMin comentó respondiendo la pregunta de su esposo- Supongo que me quedaré tras bambalinas al menos en lo que pienso qué hacer respecto a lo que nos espera...

- ¿No dijo nada?- YoonGi preguntó mientras observó a JungKookie tomar un pedacito de pollo con su manita.

- Ni siquiera supo que lo tenía en brazos, no lo notó o simplemente lo ignoró, creo que eso me dio un poco de coraje...- mencionó mirando a su pequeño bebé, dejando una cucharada de arroz en su boquita, misma que su pequeño aceptó sonriendo.- A estas alturas ya todos deben saber que estamos aquí, al menos yo y JungKookie...

- ¿Papi?- su hijo se señaló así mismo, JiMin besó su frente y sonrió.

- Seguiré estando alerta...- YoonGi menciona, JiMin asintió de acuerdo, la cena era tranquila, cada hora de comida era amena y pacifica, realmente JiMin jamás entenderá porque sus padres no pudieron tener un ambiente lejos de estereotipos, para él las comidas con sus padres eran regaños y golpes, seguir instrucciones, es cierto, en el mundo social en el que se mueve ahora necesita la etiqueta pero más que aprender JiMin detestaba las horas de comida.- Por cierto, encontré algo que a nuestra galletita va a gustarle...- comentó con gesto sonriente, JungKookie aun no podía entender la magnitud de la situación, pero preferían no hablar de ello, cuando el tiempo con su hijo era precioso.

- ¿Gusta mi?- JungKookie se enderezó y apoyó en la mesita con sus manitas. YoonGi asintió sonriendo, amaba ver sus ojos brillar. Era como ver las mismas estrellas.

- Esta en Jeju, tomé unos días libres, y podremos ir...- YoonGi menciona- Además de que le va a encantar, sé porque lo digo, amor...

- Vale, confiaré en ti- JiMin dijo con una sonrisa, YoonGi toma su mano, con cariño... recordó aquella noche, llegaron a su sencillo apartamento, donde estuvieron un par de semanas, hasta que los detectives que los Park habían contratado les estaban siguiendo la pista, las conexiones de los padres de JiMin les asustaba a ambos. Aquella buena señora, compró sus boletos de avión, empeñó las joyas, y al igual que ellos, terminó mudandose a Busan con su esposo. Fue allí donde entendió que cada promesa que le susurró debían tomar sentido.

- ¡Su, vamosh!- JungKookie dijo levantando sus bracitos, emocionado, haciendo reír a sus padres. JiMin besa su frente y asiente.

- Claro, bebé, ahora hay que terminar de comer...- menciona y le ofrece su vasito con jugo. JungKookie toma feliz con ambas manitas, sus padres lo miran, encantados de estarlo haciendo bien con su pequeño.- Haré algunos arreglos con lo del proyecto de la academia, estaba pensando en abrir un nuevo estudio...

- ¿La academia de artes?- YoonGi miró a su esposo, con curiosidad.

- Si, quiero incluir otras areas, y con ello, ampliar sus instalaciones...- JiMin dijo ayudando a su pequeño a comer.- Quiero que sea más diversificado...

YoonGi asintió.

- Esta bien, hablaré con los abogados, ellos puedes ayudarnos con el tema legal, le diré a MinHo que preparé los documentos también... ¿es necesario que estemos presentes?- YoonGi preguntó.

- No, estuve discutiendo algunos detalles superficiales con TaeMin, y me dijo que no era necesaria nuestra presencia, pero si queríamos que todo quedara plasmado en papel para que fuera legal y no hubieran problemas en el futuro...- JiMin le comentó y JungKookie lo miró sonriendo, sin darse cuenta, la cena había sido terminada.
JiMin recogió los platos y cubiertos para llevarlos a lavar y JungKookie fue a brazos de YoonGi, dejandose peinar por su hijo.

Ambos adultos disfrutaban de esos momentos de tranquilidad, en sus propias familias no era practicado un ambiente tan pacífico, al ser padres entendían hasta cierto punto a los suyos, pero YoonGi aseguraba que jamás pondría un alto a los sueños de JungKook, su hijo podría decidir en el futuro, claro que lo corregiría, que tendrían pláticas serias, pero no lo orillaría hasta el punto de tener que huir y esconderse para hacer lo que le gusta, tal como él hizo. Cada noche que se escapaba sentía la libertad en sus manos, se sentía capaz de cualquier cosa, cuando habló con sus padres respecto a la universidad, no existían opciones, entendía que apostaban por lo seguro, pero YoonGi deseaba ser compositor, Corea era un buen lugar para desarrollarse, quería intentarlo, pero le negaron ese sueño. Sus padres nunca intentaron conocer acerca de su carrera, jamás le preguntaron nada, y tal como su futura relación, ellos ya lo habían planeado sin decirle.

Una vez estuvieron en Canadá, YoonGi le contó a JiMin que sus padres ya estaban preparandose para su compromiso con una chica cuyos padres tenían una destiladora, nunca supo ni su nombre y tampoco le interesó, su hermano solo pudo decirle que con su huída sus padres estaban furiosos y eso fue todo lo que supo, volvió la atención a su hijo, quien siguió haciendo trencitas con su cabello.

- Yoon... hay que cambiar a Kookie...- JiMin le dice a su esposo. YoonGi asiente, se levanta, le da un baño caliente rápido y va a la habitación de su hijo, lo sienta en la cama que solo tiene su cobertor y algunos de sus peluches favoritos.

- Quedate aquí, no te muevas, galletita...- su bebé asiente, YoonGi se acerca al armario sacando una pijama limpia. JungKookie se deja vestir y toma su peluche favorito para llevar a la habitación de sus papás.- Listo, woah, mi hijo se ve precioso...

JungKookie sonríe, lo lleva a la habitación principal y lo ayuda a acomodarse, JiMin aparece y se da una ducha rápida para luego ponerse la pijama y acostarse al lado de su hijo, YoonGi hace lo mismo y una vez todas las luces estan apagadas, YoonGi saca una lámpara y comienza a hacer figuritas con la mano para hacer reír a su hijo, de esa forma le contaban historias...

- Descansa, mi amor...- JiMin besa la mejilla de JungKookie al verlo dormirse.- Buenas noches, Yoon...

- Descansa, mi cielo...- YoonGi acaricia la mejilla de su esposo, descansan juntos, sabiendo que cada momento es valioso para ellos.

Heredero MinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora