Prohibiciones

Capitulo 5

Años atrás...

Él había cambiado desde que lo había conocido. Lo quería, y ese chico lo había echo cambiar para bien. Él se había enamorado de ese chico, llamado Ethan, y habían comenzado a salir juntos. Había cambiado por él, por Ethan. Había cambiado y era una buena persona.

Ethan y él pasaban mucho tiempo juntos, obviamente, al ser pareja. Como esa clase de relaciones no se permitían, salían en secreto, sin que nadie los descubriera.

Pero, después de lo que paso, el odio se apodero de él y volvió a cambiar, esta vez para mal. No le importaba hacerle daño a personas inocentes, no le importaba nada, solo él mismo. Se dijo que nunca mas se preocuparía por nadie, eso solo traía consecuencias. ¿Para que preocuparse? ¿Para que arriesgarse volver a sentir ese dolor?

Sin embargo, de algo estaba seguro. Obtendría su venganza como sea.

Actualmente...

—No fue tu culpa—Repitió Adam, ya con el brazo curado, a su primo.

—¡Pero yo debía protegerlo! Y ahora ni siquiera se como esta. ¡Yo soy su guardia! Pero, mierda, ¡Soy un inútil!

—¿Acaso tu tienes la culpa de que alguien te haya empujado a un lado?—Le pregunto Adam, aunque no obtuvo respuesta de su primo—. ¿Lo ves? Tu no tienes la culpa.

—A pesar de todo, debí reaccionar mas rápido y protegerlo.

—Max, ya deja de echarte la culpa.

Max no respondió. Escucho a su primo repetir lo mismo unas veces mas, pero lo ignoro. Era su guardia, él debía protegerlo pasara lo que pasara. Y no lo había echo bien. Ni siquiera era un guardia nuevo, llevaba mucho tiempo allí. ¿Por que justo en ese momento no reacciono rápido?

Entonces recordó las palabras de su padre. Recordó cuando su padre le había dicho que era un inútil y no serviría como guardia. Y descubrió que su padre tenía razón; él era un inútil. El no haber podido defender al príncipe lo demostraba, para él.

Adam continuó hablando, sin saber si su primo lo escuchaba o no. Entonces, paso el rey. Miro a Max claramente molesto, como si de verdad él tuviera la culpa.

—En otro momento discutiremos si te despido o no—Dijo el rey fríamente.

—Disculpe, majestad, pero ¿Por que dice eso?—Pregunto Adam, intentando no enfadarse.

—Por que por su culpa mi hijo esta herido y ni siquiera se como esta.

—Majestad, Max no tiene la culpa de lo que paso. Como bien pudo ver, aunque usted estuviera herido, alguien lo empujo y distrajo. De lo contrario, Max si habría podido ayudarlo.

—¿Y tu? ¿Crees que puedes decirme a mi que hacer?—Pregunto el rey.

—Señor, jamas he dicho eso. Solo le estoy diciendo que mi primo no tiene la culpa—A Adam le costaba no comenzar a gritarle, pero se esforzó por estar calmado y no dejarse llevar por el enojo.

—Ah, así que ahora tu tienes mas inteligencia que yo, ¿No?

—Señor, tampoco he dicho eso. Solo...

—Entonces deja de meterte en mis asuntos—Le dijo—. Isaac esta en el jardín, cualquiera podría meterse si es lo suficientemente poderoso. Vi a vigilarlo y no me digas si hago algo bien o mal por que no me importa ni un poco tu opinión. Vigila a mi hijo bien, no como el guardia, si se lo puede llamar así, hizo.

Adam aguanto las ganas que tenía de darle un puñetazo. Simplemente asintió y se alejo por el pasillo, observando como el rey también se alejaba. Max se había quedado quieto y callado. Mientras Adam iba al jardín, comenzó a insultar al rey mentalmente.