Hyunjin esta apunto de casarse, pero aparece nuevamente aquella persona que lo hizo conocer el cielo y el infierno en un mismo lugar ¿Eso cambiará su destino? O seguirá sus planes de volver a amar.
× Lenguaje tóxico
× Mafia
×Posesividad
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Desde ese momento todo cambió, Minho le mostró a Hyunjin lo que era su nueva vida lo que implicaba ser el lider de una mafia, le enseñó a accionar un arma, practicaban tiro todas las tardes, cada anochecer era una visita desenfrenada al placer, iban de compras como una pareja enamorada, el pelirubio comenzó a sentirse feliz nuevamente al lado de Minho el saber la verdad le daban un poco de consuelo a su alma.
-Hyunjin- grito emocionado- ¡mira!- mostró Minho una pequeña caja transportadora.
-¿que es eso?
-míralo por ti mismo- Hyunjin abrió la caja y salió corriendo el pequeño chihuahua de pelo largo que tanto extrañaba.
-¡kkami! ¡Es kkami!- rápido corrió a abrazarlo estaba tan feliz que incluso unas lágrimas de emoción salieron de sus ojos.
-mande a que lo trajeran en cuanto antes se que es importante para ti, quiero verte sonreír.
-gracias Minho, adoro a kkami estoy feliz muchas gracias.
-¿no me merezco un beso?- Hyunjin sonrio y le dio un tierno beso que agitó su corazón.
-bueno y mira también compre algunas cosas para mascotas si quieres podemos jugar con el, sabes que no me gustan mucho los perros pero...
-bien, bien juguemos ire a cambiarme y vuelvo, ven kkami, vamos.
Minho solo sonrio esperando que esta felicidad entre ambos fuera eterna.
Toda la tarde Minho les había dado el día libre a sus guardias quería pasar tiempo de calidad con Hyunjin, jugaron a más no poder con kkami entre risas, abrazos y jugueteos terminaron acostados en el pasto.
Hyunjin se sentía feliz como en aquellos días de amor Universitario, Minho froto su mejilla con ternura, ambos comenzaron a besarse lentamente sus alientos combinados como uno solo, las manos de Minho recorrieron los muslos del alto lentamente mientras las de Hyunjin se aferraban a su espalda, la suavidad de sus besos le recordaban a la primera vez que se entregó a él, Minho se monto encima, desabotono su camisa con cuidado, sus labios comenzaron a recorrer desde su cuello hasta sus hombros con una calidez suave.
-Hyunjin... te amo, te amaré por siempre- el rubio solo asintió y sus mejillas se tornaron rosadas, los latidos de sus corazones se aceleraron, empezó a enterrar sus uñas en su espalda cuando sintió su miembro entrar una vez más en el, como Minho lo hacía lento era como si fuera quedando grabado su cuerpo dentro de él, Hyunjin empezó a llorar de placer, de emoción, pues sabia que sentirlo tan suyo era algo que no podría experimentar con nadie jamás solo con Lee Minho, el mayor lo sabía por eso beso tiernamente en todo momento su rostro, sus labios como si quisiera que jamás lo olvidara.
-te amo, te amo Hyunjin...nunca lo olvides.
-te amo Minho... te amo.
Así reconociendo un amor que jamás terminó, un amor que jamas dejó de existir unieron su cuerpo como en uno solo.
Después de su acto sexual, ambos se abrazaron con sus cuerpos desnudos Minho tomo una de las mantas y envolvió a Hyunjin como su más preciado tesoro unos cuantos besos más pactaron sus sentimientos.
-te perdono Minho...
-Hyunjin... gracias por permitirme volver al paraíso, quiero pasar mi vida a tu lado, haré lo posible por salirme de esto y estaré contigo para siempre.
Su promesa sellada con un tierno beso en su frente.
Cargo con Hyunjin como caballito hasta llegar a su habitacion entre sonrisas sinceras.
Cuando Hyunjin se quedó solo en lo que Minho preparaba la tina se puso a llorar al pensar que esta era una nueva oportunidad de la vida para ser feliz.
-¿porque lloras mi amor? ¿Te lastime?- se acerco corriendo revisando arriba, abajo.
-no, no estoy bien son lágrimas de felicidad, de saber que estoy contigo que te amo.
-también te amo- lo beso dulcemente y procedio a hacerle cosquillas causándole una risa frenética.
-jajajaa basta, basta, detente.
-no quiero verte llorar nunca más.
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