Capítulo 12: el pasadizo.

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Ainara y yo decidimos investigar el pasadizo.
Al entrar nos dio un escalofrío, al menos a mi. Estaba oscuro y la luz de la linterna no alumbraba mucho, el suelo estaba lleno de escombros, y el techo estaba lleno de telarañas.
Vamos que asco, no me jodas. Dije en voz alta.
¿Qué te pasa? Me respondió Ainara con intriga.
Que el dichoso techo está lleno de arañas y yo las odio. No puedo ver una por que me dan un asco tremendo. Le respondí con cara de asco.
JAJAJA que tonta eres. Me respondió con una sonrisa pícara.
¿Algo más que deba saber antes de que te de algo aquí dentro? Me dijo acto seguido.
A ver, odio las serpientes, las orugas y a ti. Dije.
Es broma, a ti no te odio pero no sé por qué quieres hacerme preguntas.  Le respondí interesada.
Vamos a pasar tiempo aquí abajo, a saber si los de arriba estarán bien o no, yo que se, me aburro mucho y no sé qué hacer. Me respondió cansada.
Pues si quieres descansamos unos minutos y ya me preguntas lo que quieras saber. Dije ayudando a Ainara a agacharse en el suelo.
Pues ale, aquí estamos. ¿Te puedo hacer preguntas?. Me respondió mientras apoyaba la cabeza en la pared.
Tira. ¿Que quieres saber?. Le respondí mientras sacaba una botella de agua.
Pues no se, te puedo hacer todo tipo de preguntas, ¿no?.Me dijo.
Tia que puedes hacerme las preguntas que quieras, de lo que sea. Que te voy a responder con total sinceridad. Le dije mientras le ofrecía agua de la botella.
Pues a ver, esta es personal. ¿Porqué eres tan insegura?. Me dijo.
Me quedé helada al oír esa pregunta, pero respondí.
Soy insegura por la gente de mierda que habla sin saber y menos sin pensar.  Y pues tengo muchos traumas, y bueno es una larga historia.  Respondí.
Con que es larga la historia ehh, pues tenemos tiempo y yo tengo oídos. Adelante, cuando quieras.
Algo me hizo cambiar el chip que tengo dentro al oír esa respuesta. 
No se ni por donde empezar. Pues en el cole había unos niños que dan un asco tremendo por que se metían conmigo y así estuve varios años, lo más gracioso es que un día me llamó de todo delante de la profe y esa misma no hizo una mierda. No le llamó la atención ni le dijo que fuera a jefatura. Luego, mi primer año de insti,  pensé que todo iba a ir mejor, pero al contrario. Ahí siguieron los insultos etc.. En segundo de la eso me pegaron, siguieron los insultos y casi me tiran por las escaleras, a todo eso le sumas que estaba fatal mentalmente, me cortaba, dejaba de comer... solo para aceptar mi cuerpo tal y como es. En tercero, empecé a hacer cartas de suicidio, en clase me iba fatal, iba a suspender hasta el patio, y bueno, por eso repetí.  El siguiente curso ya mejor, y actualmente,  se podría decir que estoy bien mentalmente,  aun que haya días que me den bajones de la nada. Quiero decir que si por la mañana me lo paso genial y es un día espectacular,  luego por la noche me como la cabeza con tonterías que para mí no son tonterías. Te lo he intentado resumir un poco para que...

Joder, no debería de haberte preguntado eso, ahora me siento to mal. Me dijo mientras empezaba a sollozar.
Ainara, escúchame,  no es tu culpa. Solo has preguntado y yo te he respondido, he sido sincera. Ya está,  no te comas ahora tu el coco que te meto un tortazo eh. Dije mientras le acariciaba el brazo.
Es que tia, has sufrido mucho. Me dijo mientras se le escapaba una que otra lágrima.
Y lo que no te he contado que sino me quedo aquí dos años contándote cada detalle. Le dije mientras me iba incorporando para abrazarla.
No deberías sufrir tanto, eres muy buena amiga.. Me dijo. Ya, hay veces que la vida a la gente buena le da un par de tortazos bien dados para que espabile, pero a mi te lo puedo asegurar, me ha dado por todas partes. Que si lo de insegura, que si mis "amigas", que si no se qué... Pero te darás cuenta que tarde o temprano en eso consiste la adolescencia. En tener tus cosas, tus inseguridades, pero que el día de mañana serás una mujer hecha y derecha por que has aprendido de tu adolescencia. ¿Me entiendes?. Le dije mientras volvía a sentarme.
Si, si te entiendo, pero aún así, no deberías dejar que te pisoteen. Me respondió mientras apoyaba su cabeza en mi hombro.
Ya, pero escúchame, la adolescencia es así. O te lo pasas genial o te lo pasas fatal.  Y ahí eliges tu, cual es la siguiente? Dije mientras ponía mi mano sobre su pierna.

Déjame que piense, voy a decirte una no tan tan personal, vale? Me dijo mientras se rascaba el vendaje de la esguince.
Venga, dale, dímela.  Le dije con impaciencia.
Describeme tu "pareja" ideal. Que tengo curiosidad.  Me dijo.
A ver, pues sería una chica un pelín más alta que yo, pero no mucho. Tiene el pelo ondulado pero ella se lo peina como el culo y se quita el rizo. Tiene los ojos marrones verdosos, con pecas y una sonrisa que madre mía (la sonrisa más bonita que he visto). Suele ir con chándal y camisetas anchas, ya que no se suele arreglar mucho y la única vez que la he visto en vaqueros, le quedaban genial. Tiene muy buenas amigas. Y es muy muy guapa, es simple, pero como a mi me gusta lo simple pues eso. Creo recordar que tocaba la guitarra eléctrica.
Dios, si que sabes cosas de ella, no? Me dijo.
Sí, si se cosas jajaja. Dije mientras guardaba la botella de agua.
¿Quieres seguir preguntando? Le comenté acto seguido.  
Si no te importa no. Es que soy muy curiosa, perdón por si te ha podido incomodar la pregunta de antes.. Me dijo mientras se le entristecia  la cara.
Tia, que no pasa nada, hazme las preguntas que quieras tonta, que no me importa. Le dije mientras la empujaba hacia un lado.
Pero sería mejor que investiguemos esto mientras hablamos que sino nos van a dar las uvas. Le dije mientras me ponía se pie.
Que pereza. Me respondió enfurruñada mientras movía la cabeza hacia un lado.
Anda venga, que vaga eres eh, no me esperaba esto de ti eh. Le decía mientras estiraba mi mano para que se agarrara  y se levantase.
¿Sabes una cosa?
Qué?  Le respondí.
Me das asco. Mientras decía eso me agarró  la mano para incorporarse.
Le miré con cara de asco y le dije: ah sí?  Pues a ver quien te va a ayudar a andar por aquí si no soy yo, payasa.
No pasó ni un minuto y se empezó a burlar la muy estúpida.

Tía,  que hora es? Me dijo Ainara.
La de ayer a estas horas. Le respondí súper borde.
Oye, que era broma eh, es que estoy oyendo algo raro por arriba,a ver si les ha pasado algo a los demás. Me dijo mientras empezaba a andar.
Que va, no es tarde. Son las 9 y cuarto. Empieza a anochecer a las 10. Dije mientras miraba el reloj.
Vale vale. Ahora sí, sigamos nuestra inspección. Me dijo mientras se agarraba de mi brazo.

Aquella catástrofe nos unióDonde viven las historias. Descúbrelo ahora