Capítulo 10

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El viernes llegó como un saludo brillante finalizando la semana más agitada de la vida de Baekhyun. Tenía ojeras gigantes y el rostro completamente paliducho y demacrado. Sus ánimos andaban en el suelo y el estrés formaba parte activa de su pelos disparados a todos lados. Tan descuidado como se veía estaba inusualmente tranquilo. Saludó a los colegas que encontró en su camino y suspiró de alivio al divisar su oficina en el radar.

No tenía ánimos para hablar y menos después de la guardia de la noche anterior. Giró el pómulo de la puerta y el olor a jazmín más delicioso del mundo se filtró por su nariz. El ramo de flores en el medio de su escritorio perfumó toda la habitación y sus mejillas se colorearon de rosa. Era la primera vez que recibía flores pues, él era quien las obsequiaba y, si era eso lo que las chicas sentían cuando veían flores, no le extrañaba que casi fuera un requisito cada que un hombre o una mujer les invitaba a salir. Cerró la puerta tras suyo y se acercó a tocar las flores. Eran tan hermosas y tan blancas que, como si fuese un efecto mágico, sus niveles de estrés disminuyeron un poco.

Tomó la nota sobresaliente entre los pétalos y sonrió. El envoltorio en forma de carta hizo cosquillas en su estómago y, su contenido le emocionó mucho más. La entrada a una obra de teatro a la que quería ir desde hace un par de meses junto a una invitación sugerente a dar un paseo en las riveras del Han bajo la luz de las estrellas y tomado de la mano de cierto gigante subieron sus expectativas. Marcó el número telefónico que ya era parte de los favoritos mordiendo su labio con nerviosismo.

- Hola cariño – saludó la voz grave con dulzura - ¿Cómo fue la operación?

- Fue bastante bien – suspiró deslizando su dedo por uno de los pétalos - ¿Cómo supiste que me gustan los jazmínes?

- Me lo dijo un pajarito – rió Chanyeol sin querer develar más detalles – Y este pajarito también me dijo que cuidará a los niños mientras tu te animas después de esta semana.

- ¿En serio?

- Hmm – afirmó el alto afirmativamente por la línea – Cuando te dije que quería el paquete completo hablaba en serio.

Le hizo sonrojar y reír al mismo tiempo. Para ser sincero consigo mismo por mucho que le gustaba Chanyeol y estar a su alrededor, todavía se sentía un poco extraño. Era como si hubiese entrado a una línea paralela dónde la pareja perfecta para él le esperase ofreciéndole todo lo que en su juventud torpe deseaba. Llevaban solo una semana conociéndose oficialmente pero, agradecía infinitamente a que el alto se tomase el tiempo de hacer cositas como esta para animarle en su semana.

- Entonces – continuó - ¿A las 7?

- En punto, mon chèri – afirmó el alto y le susurró con sutileza – Ponte cómodo.

La anticipación creció en su pecho y colgó la llamada más alegre de lo que había estado toda la semana. Chanyeol era perfecto. Se aseguraba de enviarle un mensaje al menos dos veces al día deseándole una buena jornada y que se alimentase e hidratase cuando pudiera. Era atento sin ser insistente o molesto mas se preocupaba por el y por sus niños. Solo dos semanas y ya sabía que su compañía era la mejor que podía tener.

Jihoon y Hami, para su sorpresa, amaban la presencia del alto a su alrededor. Por supuesto, Chanyeol se aseguraba de que él estuviese presente siempre que los niños estuvieran a su alrededor y era algo que agradecía sutilmente.

Alzó los pies en su escritorio y se reclinó en el asiento pensando que podría ponerse para esa noche. Hacía años que no se compraba ropa para salir o se vestía diferente mas le apetecía. Esa noche deseaba fuera especial y perfecta, lo más posible para los dos, porque la ocasión lo ameritaba. Con ánimo renovado, echó agua en su rostro alejando la soñolencia y salió hacia el centro comercial más cercano con sus cosas personales dando por terminado el día.

Sweet Like Cherries (ChanBaek) TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora