14. Mysterio.

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Pov _____________.

—Esto está llegando muy lejos —escuche una voz femenina, desde que desperté solo podía escuchar ya que me habían vendado los ojos.

—Quentin enloqueció —concordó otro hombre, preocupado—. Hay pérdidas materiales y humanas...no puede seguir así.

—¿Y qué propones?, ahora él esta amenazándonos a nosotros también —se lamentó la mujer.

Era sencilla la situación, a lo que había escuchado desde que desperté.

Tony le regaló unas gafas súper tecnológicas a Peter las cuales llevó al viaje escolar, esas gafas le dan acceso a la tecnología y armas de Industrias Stark.

Sencillo, sí.

¡Pero caótico!

No digo que Peter sea irresponsable, pero conozco a otro Parker que es torpe, no dudo que el de aquí sea igual de torpe.

Y no me equivocaba. Quentin Beck logró engañar a Peter y ahora él tenía poder de toda la tecnología de Stark, incluidos los drones que al parecer funcionaron para amenazar a su propio equipo.

Si eso hizo con su equipo, ¿qué puedo esperarme yo?

—Abandonemos esto antes de que sea tarde —susurró la mujer.

—¿Y la chica? —preguntó el hombre con indecisión.

Silencio, no respondieron nada. Yo estaba atada de manos con un dispositivo nanotecnológico.

Estaba más consciente que cuando desperte.

Estábamos en Londres, un viaje rápido. Al parecer Quentin Beck era un empleado de Stark, no recibió lo que merecía y tomó venganza contra el excéntrico Stark.

"Gran nacimiento de un villano." Pfff, era patético.

Escuche pasos rápidos, cosas caerse, sentí una mano adentrarse al bolsillo de mi sudadera y después silencio.

Grité aunque la mordaza amortiguó mi grito de ayuda, intenté liberarme pero fue prácticamente imposible.

—¡Carajo! —escuché la maldición de Quentin—, ¡maldita sea! —el villano lanzó al suelo un par de cosas ya que el metal produjo un ruido ensordecedor.

Su respiración agitada delató su rabia, estaba furioso.

—Con Stark aquí es más complicado todo —farfulló entre dientes, hablando para sí mismo—. Malditos traidores.

Escuche pasos apresurados, duraron al menos cinco minutos hasta que sentí como me quitaba aquella venda negra, cerré los ojos por inercia ante la poca luz.

—Escucha bien, niña —lo mire a los ojos—. Si quieres salir ilesa de esto, debes hacer todo lo que yo te diga —ordenó con frialdad.

Pasó su mano a mi oído, colocando un auricular negro, mire con rabia al hombre y entonces se apartó.

—El plan es sencillo —avanzó a una mesa metálica, todo en ese lugar estaba hecho un asco. Señal de la desesperación que vivieron sus secuaces y el mismísimo Quentin.

Horas después. 

Había un "elemental" atacando el Puente de la Torre, nunca imaginé conocer un lugar emblemático de Londres de esta manera. Quentin estaba sobre el puente, dando órdenes a los últimos secuaces que tenía e incluso escuche que mencionó a un tal Nick Fury.

Yo era su plan de contingencia, estaba sobre un extremo del puente sin ser vista, siendo escoltada por un dron blanco que apuntaba sus disparadores contra mí.

Finesse 《Peter Parker y tú》©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora