A Patchwork Family [Español]

1. Nuevas Llegadas y Viejas Rencillas

Harry miraba los restos de té en el fondo de su taza, con un extraño zumbido en los oídos que ahogaba el bullicio del Caldero Chorreante. Sentía el pecho apretado y aplastado, como si Dudley estuviera sentado sobre él. ¿Acaso Harry había recibido un golpe en la cabeza recientemente? Tal vez se había conmocionado durante el caótico viaje en el Autobús Noctámbulo la noche anterior. Esa parecía ser la única explicación plausible para que el profesor Dumbledore apareciera aquí y le dijera a Harry que pasaría todo agosto viviendo con el profesor Snape.

-¿Harry?

Levantó la vista hacia Dumbledore. El director lo observaba con una expresión de leve preocupación.

-¿No puedo quedarme aquí, señor? -preguntó Harry, apretando la taza tan fuerte que pensó que podría romperla entre sus manos.

Dumbledore suspiró.

-Me temo que no, Harry. Eres demasiado joven para quedarte solo en el Callejón Diagon durante tanto tiempo. Simplemente no es apropiado.

Harry mordió su labio.

-Pero... bueno, sabe que Snape no me agrada mucho, ¿verdad?

-El profesor Snape -lo reprendió suavemente Dumbledore.

-Claro. Bueno, estoy seguro de que él preferiría que me quedara aquí.

-El profesor Snape ya ha aceptado cuidarte durante el resto del verano en su casa -dijo Dumbledore.

Harry ahora se preguntaba si Snape había sido quien había sufrido una lesión reciente en la cabeza, ya que no podía imaginar ninguna otra circunstancia que obligara al hombre a aceptar que Harry se quedara con él. Después de todo, hasta donde Harry sabía, los trasplantes de personalidad completa aún no eran posibles.

-Te aseguro que todo estará bien -dijo Dumbledore en un tono que probablemente pretendía ser tranquilizador. Dado que acababa de usar la frase "todo estará bien" mientras se refería a Harry y Snape obligados a convivir durante un mes, terminó sonando un poco vacío-. Estaré al tanto de la situación y me ocuparé de cualquier problema que surja.

-Pero señor, si me voy a quedar en su casa, ¿no podría quedarme en la Torre de Gryffindor o algo así? ¡Apuesto a que ambos preferiríamos eso!

-El profesor Snape no vive en Hogwarts durante los veranos -dijo Dumbledore, con una leve sonrisa en los labios-. ¡Los profesores también tenemos vidas fuera de la escuela, ya sabes!

Vaya. Por alguna razón, Harry siempre había imaginado a sus profesores quedándose en sus cuartos de Hogwarts todo el año. Era ridículo, por supuesto, pero aún así... Snape, en la mente de Harry, estaba inextricablemente ligado a las mazmorras. Por supuesto, nada impedía que Snape viviera en algún tipo de mazmorra o cueva fuera de Hogwarts. Eso ciertamente no lo sorprendería.

-Solo... ¿está seguro de que no hay nadie más? -dijo Harry, con un toque de desesperación en su voz.

-Esta es la única solución -dijo Dumbledore, sacudiendo la cabeza. El corazón de Harry se hundió-. El profesor Snape es la única persona en la que confío para tu seguridad.

Harry trató de no gemir mientras asentía, con los labios apretados. Realmente, esto era su suerte.

-Realmente deberíamos irnos -dijo Dumbledore, mirando su reloj. Harry notó que no tenía números, sino que estaba rodeado de diferentes planetas, flotando en la esfera-. El profesor Snape nos está esperando. Tengo algunos hechizos que pueden ayudarte a empacar rápidamente, si me indicas tu habitación.

Harry volvió a asentir. Se sentía extrañamente agotado y no pudo hablar mientras conducía a Dumbledore hacia las escaleras del Caldero Chorreante y lo llevaba arriba a la habitación en la que había estado desde la noche anterior.