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⚠️: AU moderno
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—¿En serio no lo has hecho?
Lihua pregunta, su voz resuena sobre la habitación. Golpea las paredes del cuarto mientras está sobre Aether.
Se ve avergonzado, sus mejillas se iluminan de un hermoso color rosado mientras trata de evitar los ojos carmesí.
—No es nada malo, es solo curiosidad. Supongo que pensé que ya lo habías hecho. —dice, sentándose ahora mientras pone una mano sobre su barbilla— Está bien. Podemos dejarlo para después.
—¡No, no!… —Aether se levanta, angustiado ante la negativa antes de darse cuenta de sus palabras— No es que no quiera. Está bien. Yo quiero esto. Créeme.
Y es cierto, ha soñado bastante últimamente con esto. Esos sueños húmedos donde ve piel blanca como lienzo esperando a ser pintada, dónde escucha la más bella melodía saliendo de labios. Dónde siente el tacto electrizante del amor tácito entre ellos.
—¿Estás seguro?
Piensa un poco más, ve como una gota de sudor rueda desde su frente hasta la barbilla. Quiere lamerla y seguir un rastro por su cuello hasta llegar a la clavícula y dejar una marca morada.
Está muy seguro.
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Alza una de las piernas de su novia, la agarra por uno de sus muslos hasta su unión contra la rodilla y la hecha hacia atrás. Casi toca su hombro mientras Aether jadea, murmura, y enloquece sobre como se siente el interior de Lihua.
Sus palabras no tienen sentido y carecen de coherencia, es un desastre que mueve sus caderas desenfrenadamente mientras busca ese subidon de placer. Lihua se lo permite.
Besa, lame, chupa; la piel sobre su cuello se ha magullado y adquiere tonalidades púrpuras; la sangre baja sobre los pliegues de su piel en un espectáculo candente mientras la excitación los corroe a ambos.
Lihua baja su mano, moviendo el clítoris en círculos ásperos mientras gime y grita. Saca la lengua mientras mueve las caderas, buscando, huyendo, o anhelando ese placer que siente cada vez que el pene de Aether llega más profundo hasta su coño expuesto.
Unas embestidas más y ambos están acabados, finalizan con un beso de lengua que los cansa hasta que Aether sale muy rápido, (le pide disculpas a Lihua al instante) mientras se acuesta. Su pecho se agita mientras tiene los ojos cerrados, puede sentir como su pecho se enfría mientras las gotas de sudor aún están sobre su rostro.
—¿Y?
Lihua habla, igual cansada.
—¿Y qué?
—¿Qué tal para ser tu primera vez?
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