Soulmates VII

Capítulo 7. Cada vez más cerca y, a la vez, cada vez más lejos

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POV Draco

- Lo bueno de que estén en Grimmauld Place es que estarán a salvo - comentó Regulus, viendo a su sobrino revisar libros -. Lo malo es que claro, si tiene el guardapelo falso, sumará uno mas uno, e implica que entre en mi habitación... y eso no me hace tanta gracia.

- ¿Es que acaso guardas fotos post coito con su padre? - preguntó Draco, alzando una ceja.

- Una - le respondió -. Pero esta bajo fuertes sortilegios. En realidad, varias - Draco alzó la vista por fin de los libros y lo miró.

- ¿Es que acaso os molaba haceros fotos mientras...? - Regulus suspiró con nostalgia y arrugó la nariz.

- ¿De verdad quieres tener esta conversación? - preguntó. Draco hizo una mueca -. También te digo que si tengo que elegir, no se si prefiero que las encuentre mi hermano o ella - Draco chistó, dándole la razón.

- Debe ser algo genético - comentó. Regulus lo miró sin entender -. Lo de los morbos raros.

- ¿Estamos teniendo una conversación sobre nuestra vida sexual? - preguntó Regulus. Draco se encogió de hombros.

- Tenemos algo en común; es con dos Potter. Aun me quedaron ganas de cosas - Regulus asintió.

- Si, a nosotros también... en otra vida.

- Es una sensación muy rara - comentó Draco -. Cuando por fin asumes lo que sientes, me refiero.

- Mas bien cuando por fin te das cuenta de cuánto les amas - el rubio asintió -. Es como... No sé explicarlo. Tu vida ya no vuelve a ser igual.

- Todo en lo que antes creías, en los que te habían educado... Te das cuenta de que nada tiene sentido. Amarle es lo único que sí. No me puedo creer que finalmente le este dando la razón a Dumbledore.

- Bueno... - Draco le miró -. ¿Tú tampoco?

- No sé. Quizá es influencia de mi padre - dijo, recostándose en la silla -. Pero siempre he tenido la sensación de que pudo haber hecho las cosas mucho mejor y no quiso, y si lo hizo, fue porque otros le obligaron. Mas bien Gia. Se que estuvo entrenándola desde pequeña, pero... por ejemplo, la Legeremancia no la exploró hasta cuarto, y la Oclumancia hasta quinto. Y aun así no le funcionaba...

- ¿Ah no? - comentó Regulus -. Qué raro.

- Bueno, no es que no le funcionaba. Al menos con Snape, pero seguía teniendo sueños raros.

- ¿Sueños raros? - repitió -. ¿Qué tipo de sueños?

- En la mente del Señor Tenebroso - respondió, volviendo a sus libros. Regulus arrugó aún mas la frente.

- ¿Potter tiene acceso a la mente del Señor Tenebroso? - Draco asintió -. No me gusta.

- A mi tampoco.

- No, Draco - el muchacho alzó la vista -. No me gusta nada. No es normal. ¿Así, sin mas? ¿A kilómetros? - Draco asintió -. No me gusta. Nada. No es bueno. Es peor que malo.

- El Señor Tenebroso intentó engañarla en quinto - Draco le explicó la aventurilla del Ministerio y la treta de Potter.

- Me gusta todavía menos. ¿Has encontrado algo? - preguntó. Llevaban días enfrascados en preparar el plan de huida, recabando hechizos y cosas que pudieran serle útiles.