Soulmates VII

Capítulo 6. Las comparaciones son odiosas

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POV Gianna

Gia contemplaba el techo, pensando. La última imagen de Draco se le había grabado demasiado a fuego en la retina y era incapaz de borrarla. Esa imagen de sufrimiento, de desprecio hacia algo que claramente no quería hacer... le generaba muchos sentimientos encontrados. ¿Se había dado cuenta Draco al fin de lo que implicaba ser mortífago? ¿De que Voldemort no confiaba en él, ni confiaría nunca?

- ¿Gia? - la llamó alguien a su lado. Ron estaba en el suelo, enredado en el saco de dormir, y la miraba -. ¿Qué ocurre?

- Solo... pensaba - comentó.

- ¿Has entrado de nuevo en su mente? - Gia negó con la cabeza.

- No, no es eso, es... otra cosa - respondió, tratando de desviar el tema -. No te preocupes, no pasa nada, es cosa mía.

- Eres mi amiga, Gi. Sabes que puedes contarme lo que sea...

Gia siguió mirando el techo. ¿Podría confiar en Ron? A fin de cuentas, no le había creído con lo de Ginny. Aun así, necesitaba contárselo a alguien.

- Le he... visto - murmuró. Ron la miró, arrugando la frente -. A... él.

- ¿A Quién-tú-sabes?

- A... Draco - respondió en voz bajita. Como esperaba, Ron bufó.

- Gia... ¿Cuándo vas a soltar ese lastre? - le preguntó -. Gia rodó los ojos -. Hablo en serio. Malfoy solo te ha traído disgustos y...

- Draco fue quien me liberó del filtro de amor de tu hermana - le confesó. Ron se quedó callado.

- Ah, o sea, porque te lo dijo Draco Malfoy, ya le crees. Es increíble, ¿no te das cuenta de como intenta siempre manipularte? - Gia se incorporó, ofendida.

- ¿Sabes cual es la diferencia? Que Draco no necesita un filtro de amor para que me enamore de él, nunca lo necesitó. Y no, no me lo dijo - le aclaró -. Me lo demostró.

- ¿Ah sí? ¿Cómo?

- Ya te lo dije, Ron; yo nunca podría sentir nada por tu hermana. Los filtros de amor te hacen encapricharte, no enamorarte. Y te hacen obsesionarte con la persona que realmente amas - Los ojos de Ron soltaban chispitas -. Y yo solo puedo amarle a él - le aseguró, y se dio la vuelta en el sofá para intentar dormirse. Ron se quedó mirándola.

«Yo solo puedo amarle a él», repitió Ron en su cabeza.

«Una puñalada en el estómago duele menos, joder»

«En realidad, no debería pillarte de nuevas. Ya lo sabías.»

«Pero no por eso duele menos»

«Nunca habrá alguna forma de que me quieras a mí, ¿verdad?», se preguntó a sí mismo, resentido. De espaldas a él, Gia se quitó una lagrimita que le caía, con disimulo. Oyó como su amigo se daba la vuelta, igual que ella, para intentar dormir.

«No lo puedes entender, Ron. Es mas que amor.»

«Sigues insistiendo en que es culpa tuya. No lo es. Draco es una persona adulta, con capacidad de pensar. O al menos, eso te demostró durante años. Piénsalo. Si no lo mató, era por algo. Bajó la varita cuando Dumbledore le dijo que Voldemort nunca podría perdonarlo.»

«¿Eso quiere decir algo?»

«Quizá sí, quizá no. Eso solo lo sabe una persona, y es Draco Malfoy. La gente da muchas vueltas. Pero tú no puedes hacerte responsable de los errores de los demás, Gia». Gia suspiró. No quería, pero sentía que podía haber hecho mucho más por él.