Legados (Secuela Fuego y Agua)

Viaje y llegada

Era de mediodía cuando las tropas noxianas salieron de los bosques y entraron a los territorios del imperio, habían partido antes del alba con las sospechas de que podrían descubrir en donde se ocultaban, así que moviéndose lo más rápido que podían y sin momentos de descanso hasta que el sol estuviera ya plenamente en el cielo con una visibilidad lo suficientemente buena como para un contraataque más efectivo (aunque aquello era más un pretexto para que los legionarios apresuraran el paso en la marcha). Ahora se encontraban en las planicies de un valle con algunas colinas pequeñas en todo el páramo, la mayoría de los soldados se encontraban despreocupados, aunque mantenían la formación sin mayor inconveniente, sabían perfectamente que se encontraban demasiado lejos para que las tropas demacianas los estuvieran persiguiendo, aunque por la mercancía valiosa que traían no descartaron esta posibilidad.

Dreiner por su lado caminaba a un paso lento y cabizbajo, el dolor de su pierna era algo que no le dejaba tranquilo y que ralentizaba su paso lo cual hacía que constantemente le empujaran para que no se quedará atrás, su cuerpo no estaba en mejor estado, la noche había sido fría y a pesar que no se congeló tampoco tuvo una noche cálida, estaba entumido mojado por el rocío y la niebla que bajaba del bosque y por la posición en la cual se encontraba no había podido descansar bien. Estaba rodeado por legionarios en una suerte de escota improvisaba, estaba atado de manos y unos grilletes se le ajustaban en los tobillos unidos por una cadena lo cual hacía que su paso fuera lento (y más lento por el dolor en su pierna), detrás de él se encontraba Draven quien se había ofrecido personalmente para escoltarlo, rechazando ir al frente con Duk como sería habitual en la tropa, su expresión junto con su actitud no habían cambiado para nada aun seguía serio con una mueca de molestia y no parecía tener mucha paciencia cuando un soldado intentaba empujar a Dreiner para que este apresurara su paso (aunque él hacía lo mismo cada que el príncipe bajaba el ritmo).

El sol poco a poco comenzaba a ser envuelto en espesas nubes que se mostraban más avanzada la planicie indicando que ya no se encontraban en Demacia. La planicie en la cual caminaban poco a poco comenzaba a terminar mostrando en la lejanía grandes árboles de pino y roble juntos tapando la visión y mostrando el inicio de los bosques Noxianos. La tropa se detuvo, Dreiner observó alrededor curioso del porqué esta pausa haciendo un esfuerzo para poder observar el frente de todos los legionarios, en el lugar en el cual estaba Duk dando la orden para que se detengan y que se dispersen por el lugar en una especie de descanso antes de continuar, todos los soldados acataron la orden y comenzaron a dispersarse por la planicie sentándose en grupos o solos para poder descansar y comer algo para reponer fuerzas, el príncipe observaba alrededor con la duda sobre que tendría que hacer, aquello no duró mucho ya que Draven lo tomó del brazo y lo llevó a un lugar apartado, lejos de todos los legionarios.

Lo sentó en la tierra y lo dejo ahí sin más para después ir a buscar comida con los soldados que manejaban las raciones, Dreiner al estar solo y notar que todos los legionarios no le prestaban atención intentó zafarse de sus ataduras de sus muñecas, no podía hacer mucho movimiento si no quería que le descubrieran, las ataduras estaban ajustadas y al parecer el nudo se hacía cada vez más apretado a medida que forcejeaba con la soga, así mismo tenía un problema y ese era los grilletes que ataban sus tobillos, aquello sin duda seria algo lo cual no podría sacarse con sus manos así como así, y de seguro si intentaba moverse bruscamente la cadena comenzará a hacer ruido lo cual alertará a los soldados quienes al ver que se estaba escapando se lanzaran a por él de forma inmediata. Dreiner detuvo por un momento su forcejeo y observó a su alrededor, los soldados seguían en sus cosas como si él no existiera continuando su comida y hablando entre sí, haciendo aquello observó el lugar en el cual estaban Duk y Draven hablando entre sí (los únicos que estaban de pie en todo el lugar), naturalmente no podía escuchar lo que hablaban pero podía notar cierto descontento tanto del mayor como el más joven.