La escuela

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La noche se hacía cada vez más vieja y el frío del próximo invierno se hacía cada vez más notorio, dentro de la celda la espesa neblina del exterior ingresaba lentamente por las distintas grietas que estaban marcadas en la vieja piedra de toda la muralla, el lugar se envolvía lentamente en un frío leve, mientras que las antorcha que se encontraban en los pasillo poco y nada podía hacer más que comenzar a apagarse. La mayoría de las celdas se encontraban silenciosas y a la primera vista se podían notar vacías por la espesa oscuridad, pero solo era cosa de acercarse para escuchar la respiración de las personas las cuales se encontraban en su interior descansando para otro día en ese edificio.

 Dreiner estaba despierto, sentado en el frío suelo cubierto de paja, se había mantenido así desde que le habían encerrado en aquella celda y no lograba conciliar siquiera el más mínimo sueño a pesar del cansancio que sentía su cuerpo y mente... <<Tocaste fondo>> pensaba en cada segundo que transcurría dentro de aquella celda, encorvándose cada vez que una brisa de frío aire pasaba a su lado, intentando aguantar aquella sensación helada ya que el camisón que portaba no lo protegía demasiado. Se llevó la mano al pecho mientras daba un largo suspiro, con sus dedos sintió el medallón del collar que le había dado Valeria antes de partir, para su suerte no le descubrieron el medallón al momento en el cual le habían despojado de su armadura, pensaba en su amada, en cómo le gustaría estar con ella abrazándola y acariciando lentamente aquel suave cabello, sin ninguna preocupación más que el cuando seria el día de su boda, pero tan solo pensar en aquello le causaba pena.

 La situación en la cual se encontraba ahora le estaba diciendo que le había fallado... le había fallado a la promesa de estar devuelta al momento en el cual la campaña finalizará, estando sano y salvo en el reino y demostrándole a todos los que le decían que no estaba listo que estaban equivocados, pero al parecer quien estaba equivocado era el. Aún no se creía que un simple error pudiera costarle tan alto, ¿Será que todo lo que había aprendido en los años de entrenamiento fue en vano?, aquello no podía ser... o al menos eso era lo que quería creer el príncipe, ya que gracias a ese entrenamiento logró grandes victorias y vencer a los campeones de los ejércitos enemigos, sin embargo al momento en el cual se enfrentó a los noxianos en aquel bosque parecía más un novato con una espada que un guerrero con experiencia en combate, el cual sobrevivió y logró herir a sus enemigos por mera suerte de los dioses.

 Suspiro de forma pesada mientras intentaba alejar aquellos pensamientos de su mente, a sabiendas que una mente débil en una situación difícil era la peor tortura. Observó hacia su izquierda en donde se observaba una abertura la cual hacía la función de ventana, aunque más que eso se veía como un mero drenaje para el agua que se derramaba en el exterior, observaba que aún era de noche, sin embargo habían pasado varias horas desde que llegaron a la ciudad y fue encerrado en la celda, según sus cálculos faltarían unas dos horas para que comience el amanecer... para que comenzara otro dia... otro día el cual sería un completo misterio para Dreiner, no sabía lo que le ocurriría, que sería lo que le haría, ¿Interrogarlo?, ¿torturarlo? o quizás simplemente lo dejarían en aquella celda hasta que se les ocurra qué hacer con él. Una cosa seria segura debía descansar si quería sobrevivir, pero aunque quisiera no podría hacerlo, el lugar era demasiado incómodo y los pensamientos en su cabeza lo mantenían despierto a pesar de su cansancio, pero aún con esas intentó acomodarse yendo a uno de los rincones de la celda para estar mejor y cerró los ojos para intentar descansar.

 Sin embargo, de forma completamente repentina la puerta de al final del pasillo se abrió golpeando la pared con el ruido suficiente para llamar la atención de todos los que estaban en las celdas, tras eso dos guardias hicieron acto de presencia con garrotes en sus manos para comenzar a golpear los barrotes mientras caminaban por los amplios pasillos repletos de celdas. mientras gritaban a viva voz.

Legados (Secuela Fuego y Agua)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora