El sol comienza a asomarse por Storybrooke, los cánticos de los pájaros comenzaron a sonar, Chris comienza a abrir los ojos antes de levantarse.
La luz del amanecer se filtraba suavemente a través de las cortinas, bañando la habitación en tonos dorados y cálidos. Chris se estiró, sintiendo cómo el sueño se desvanecía con cada rayo de sol que tocaba su piel. Los sonidos matutinos de Storybrooke lo envolvían en una melodía tranquila, una dulce bienvenida a un nuevo día en este lugar que empezaba a sentir como su hogar.
Se levantó y se arregló, su reflejo en el espejo mostraba a un hombre cambiado, no solo en apariencia sino también en espíritu. Bajó las escaleras con la decisión de un hombre que había encontrado un propósito, aunque aún no estuviera del todo claro cuál era.
Al llegar al pie de las escaleras, la abuela y Ruby estaban ya en plena actividad, preparando la cafetería para los primeros clientes del día.
-Buenos días, Chris. - Saludó Ruby, su sonrisa era contagiosa y genuina.
-Buenos días. - Respondió Chris, devolviéndole la sonrisa. Se acercó a la barra, donde la abuela le sirvió una taza de café sin que él tuviera que pedirla.
-Parece que ya te estás acostumbrando a los madrugones de Storybrooke. -Comentó la abuela con un guiño.
Chris asintió, tomando la taza caliente entre sus manos.
-Sí, y cada día me gusta más. -Admitió.
Ruby y la abuela intercambiaron una mirada cómplice. Sabían que Storybrooke tenía un efecto especial en las personas, y Chris no era la excepción.
-¿Tienes planes para hoy?-Preguntó Ruby, mientras limpiaba una mesa cercana.
Chris reflexionó un momento antes de responder.
-Creo que voy a seguir explorando el pueblo. Hay mucho que no conozco y muchas personas que aún no he conocido.
-Esa es una excelente idea. -Dijo Ruby, animándolo. - Y si necesitas algo, ya sabes dónde encontrarnos.
Con el calor del café recorriendo su cuerpo y el aliento de un nuevo comienzo, Chris salió de la cafetería con un sentido de propósito. Storybrooke estaba lleno de posibilidades y él estaba listo para descubrirlas todas, una por una. Había tomado la decisión de quedarse un tiempo en Storybrooke.
Mientras paseaba, podía observar cada habitante del pueblo. Emma Swan, sus amigos y familia seguían a lo suyo.
Mientras tanto, Chris se sienta en el parque para tomar un descanso. La paz y la tranquilidad iba tan bien hasta que una sombra lo interrumpió. El hombre de cabello rubio oscuro levanta la cabeza y ve cara a cara a Maléfica, quien lleva un buen tiempo resucitada y no hace mucho se había reunido con su hija, Lily. Ahora toca reunirse con su hijo.
- Hola, Chris... - Decía Maléfica. Era lo primero que podía empezar con la conversación.
Chris se sorprendió al ver a su madre biológica. Desde que era un bebé, fué arrebatado por su padre Hades de ella. Jamás le dejó verla alguna vez en su vida. Ahora que se encuentra en Storybrooke, podría tener la oportunidad de conocerla.
- Mamá... - Chris pudo deducir de que era su madre, a pesar de no haberla conocido nunca.
La presencia de Maléfica en el parque era imponente, pero su expresión era suave, casi vulnerable. Chris podía sentir la complejidad de las emociones que se agitaban en su interior: el resentimiento por años de separación, la curiosidad sobre la mujer que le dio la vida, y una chispa de esperanza por lo que esta reunión podría significar para su futuro.
-No sabía si algún día te encontraría. - Continuó Maléfica, su voz era un susurro que apenas perturbaba la quietud del parque. - Pero siempre supe que eras fuerte, como yo.
Chris se levantó, enfrentando a la figura de su madre.
-He tenido que serlo. -Respondió con firmeza. - La vida no me ha dado otra opción.
Maléfica asintió, entendiendo la dureza de sus palabras.
-Y ahora que estamos aquí, ¿qué te gustaría saber? -Preguntó, extendiendo una invitación a un diálogo que había sido pospuesto durante demasiado tiempo.
Chris miró a su alrededor, a los árboles que susurraban historias de magia y misterio, a los habitantes de Storybrooke que continuaban con sus vidas, ajenos al encuentro entre madre e hijo.
-Quiero saber todo. - Dijo finalmente. - Pero, sobre todo, quiero saber quién soy yo en este mundo lleno de cuentos y leyendas.
Maléfica sonrió, un gesto que transformó su rostro de manera sorprendente.
-Entonces hablemos. - Dijo. - Y comencemos por el principio.
Sentados en un banco del parque bajo la sombra de los árboles centenarios, Maléfica comenzó a contarle a Chris la historia de su linaje, de los poderes que corrían por sus venas, y de los mundos que se entrelazaban con el suyo. Chris escuchaba, absorto, mientras las piezas de su pasado caían en su lugar, formando un mosaico que, por primera vez, empezaba a tener sentido.
La conversación entre Chris y Maléfica se extendió durante horas, cada palabra y cada pausa llenas de significado. Maléfica compartió historias de su pasado, de los errores que había cometido y de las batallas que había librado. Habló de la fuerza que había encontrado en la adversidad y de la sabiduría que había adquirido con el tiempo. Chris escuchaba atentamente, absorbiendo cada detalle, cada emoción que su madre transmitía.
-Y ahora, mi querido hijo, debes encontrar tu propio camino. -Dijo Maléfica, poniendo fin a su relato. - Tienes el poder de Malefica y la astucia de Hades, pero también tienes un corazón que es solo tuyo. Úsalo bien.
Chris asintió, sintiendo una mezcla de emoción y determinación.
-Gracias, mamá. Por todo.
Se despidieron con un abrazo que selló su reencuentro, un abrazo que contenía promesas de un futuro en el que estarían presentes el uno para el otro.
Con el corazón lleno de nuevas revelaciones, Chris se dirigió de vuelta al hostal. El sol comenzaba a descender en el cielo, tiñendo las nubes de tonos rosados y naranjas. Mientras caminaba, reflexionaba sobre las palabras de Maléfica y sobre lo que significaban para él y su futuro en Storybrooke.
Al llegar al hostal, vio a Ruby detrás del mostrador, ocupada con las tareas del día a día. Su presencia era un recordatorio reconfortante de la vida cotidiana en el pueblo, una vida que ahora Chris estaba listo para abrazar plenamente.
-Parece que has tenido un día largo. - Comentó Ruby al verlo entrar.
-Sí, pero ha sido un día bueno. - Respondió Chris con una sonrisa.
Ruby le devolvió la sonrisa y continuó con su trabajo, mientras Chris subía a su habitación. Se sentó en la cama, pensando en todo lo que había aprendido. Sabía que el camino por delante estaría lleno de desafíos, pero también de oportunidades. Y con la ayuda de su nueva familia y amigos en Storybrooke, estaba listo para enfrentarlos todos.
Esa noche, Chris no escribió en su diario. En lugar de eso, se quedó mirando por la ventana, contemplando las estrellas que comenzaban a aparecer en el cielo nocturno. Sentía una paz que no había conocido antes, una paz que venía de entender quién era y de saber que tenía un lugar en el mundo.
Con la noche envolviéndolo en su manto de silencio, Chris cerró los ojos y se permitió soñar con las infinitas posibilidades que le esperaban.
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Once Upon A Time: El Hijo De Malefica
Fanfic¿Que pasaría si Malefica tuviera otro hijo y que nació mucho antes que Lily? ¿Que pasaría si el padre es Hades? Historia ambientada en Once Upon A Time y sobre el hijo de Malefica y Hades.