Hola ! Me alegra mucho que les estén gustando mi historia!💖 aquí les dejo una imagen de mi gótica favorita.
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– Y bien! Qué más debemos vamos a comprar?– mire a Trina después de un rato de silencio.
Estaba tan absorta en mis pensamientos que se me olvidó por completo lo que estábamos por hacer.–Amm que compraste Trina?– le pregunté girándome a ver los asientos de atrás repletos de bolsas de compras.
– pues compre, Globos, una máquina de Niebla, mantel para la mesa para los refrigerios, todos los cubiertos.–
— okay entonces solo nos faltarían Serpentinas y esas cositas..– ella solo asintió.
– las bebidas lo compraré ese mismo día.– la vi sonreír cosa que me pareció extraño pero lo ignoré.
–y la comida y todo eso lo compramos el jueves.– añadió notando que estaba por decir algo.
– si está bien, gracias Trina!– le sonreí.
luego de esa pequeña conversación cada una nos perdimos nuestros propios y grandes pensamientos Por unos minutos hasta llegar a un centro comercial y disponernos a comprar las cosas para ese día.
Discutimos un poco en la elección de decoraciones pero ya después coincidimos en una que nos gustó mucho en particular.
Después de una hora regresamos a casa agotadas, apenas llegamos me bajé, abrir la puerta de atrás sacando del asiento trasero algunas bolsas ayudando a Trina para luego adentrarme a la casa, encontrándome con mi madre en la sala viendo TV y la salude.
Deje las bolsas sobre la mesa mientras le explicaba el porqué de esas bolsas haciéndola saber de antemano que iba a ver una fiesta.
– wow, primera vez que las veo trabajar en algo juntas..– menciona mi madre al ver a Trina con las otras bolsas colocandolas de igual forma sobre la mesa para mirarla.
–si no te emociones mamá .. prácticamente me rogó.– yo giré los ojos.
– si pero antes te hubieses negado más pero ese no fue el caso hoy o si?– dije burlona alzando la ceja.
– Ajajajaa admite por una vez hija que amas mucho a tu hermana..–frunció su ceño mirándonos mal a ambas.
– agh ya se vuelven irritantes cuando están juntas..– comentó antes de irse por los escalones hasta su habitación.
Sonreí.. Trina nunca dejará de ser Trina, mire a mi madre con complicidad riéndonos minutos después de que ella se fuera de ahí.
– Ajaja bueno, iré a leer unos libros que tomé prestado en la biblioteca.– saqué los dos libros de mi bolsa enseñándolos.
– No quieren comer?– Yo negué con una sonrisa apenada.
– Luego como mamá y quizás trina también, no te molestes es que estoy muy apresurada por leer estos dos libros–
