19 de Junio. 22:40h p.m. Norte de Forks.
Un coche gris corría a mucha velocidad por la carretera principal al norte. Dayan, Mike, Lucas y Janet viajaban a toda velocidad para llegar a la hora acordada a sus casas antes de ser recibidos por las caras rabiosas de sus padres.
- Tío, frena un poco. Podemos dar la excusa de siempre, el alcohol y bla bla. Lucas, por favor. - dijo Janet desde el asiento del copiloto a su hermano.
- Estamos a pocos me... - pero el coche empezó a derrapar en el hielo de la carretera. - ¡No funcionan los frenos! - gritó desesperado.
- ¡Cuidado, Lucas! - le grité, pero al intentar volver a frenar, el coche no respondió y todos nos agarramos a lo que teníamos a mano, Lucas al volante, Janet a la puerta del coche, Mike y yo entre nosotros.
El coche giró bruscamente, los gritos llenaron el vehículo mientras se salía de la carretera y chocaba contra un árbol. El impacto fue brutal. Mi cabeza golpeó algo duro y luego... todo se volvió negro.
Cuando desperté, la primera sensación fue el frío. El aire helado quemaba mis pulmones y cada respiración era dolorosa. Abrí los ojos y vi el cielo nocturno, claro y lleno de estrellas. Intenté moverme, pero el dolor me atravesó como un cuchillo.
Entonces lo vi, una figura alta y delgada que se acercaba con rapidez. Mis ojos estaban borrosos, pero podía ver su rostro. Sin decir una palabra, me levantó del suelo con una facilidad sorprendente y me llevó en sus brazos. El miedo y la confusión me invadieron, pero estaba demasiado débil para resistirme.
- Será mejor que no te muevas, Dayan. - le susurró antes de que perdiera el conocimiento.
Pero recordé su rostro, esos ojos anaranjados, pelo marrón y un poco de barba. Lo único que pude ver en él era un collar colgando de su cuello con un escudo, el de la familia Denali, aquellas personas que había conocido cuando era pequeña y los había visto sólo una vez en el lago congelado.
Desperté en una cama suave, en una habitación desconocida. La luz del sol se filtraba a través de unas gruesas cortinas, bañando todo en un cálido resplandor. Sentí una mezcla de confusión y alivio; estaba viva, pero no sabía dónde. La puerta se abrió lentamente y entró una mujer. Su cabello rubio brillaba como el oro y sus ojos eran de un amarillo anaranjado, llenos de compasión y curiosidad.
- Hola, Dayan. ¿Cómo te sientes? - preguntó con una voz suave.
- ¿Dónde estoy? - susurré, mi voz era apenas un murmullo.
- Estás con nosotros, los Denali. Mi nombre es Kate. Garrett te encontró después del accidente y te trajo aquí. - se acercó a ella con un vaso lleno de agua, lo agradecí y le pregunté.
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DAYAN DENALI
ФанфикEres una joven humana que pronto será el vampiro más poderoso de ambos clanes. Ahora, eres no solo la protegida de los Denali, sino también amiga de los Cullen. Atraes la atención de tu salvador y los demás miembros del clan te consideran parte de...