Eres una joven humana que pronto será el vampiro más poderoso de ambos clanes.
Ahora, eres no solo la protegida de los Denali, sino también amiga de los Cullen. Atraes la atención de tu salvador y los demás miembros del clan te consideran parte de...
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Días después, Renesmee se quedó en casa bajo la tutela de Carmen y Eleazar. Confiando en ellos, Bella y Edward tuvieron que alejarse unos días, pero volverían para la boda de los dos Denali. Mientras tanto, la casa estaba llena de actividad, con los preparativos de la boda de Kate y Garrett en pleno apogeo.
Renesmee y yo habíamos asumido papeles importantes en la organización del evento. Su habilidad para percibir los gustos y deseos de las personas era invaluable, lo que la convirtió en la decoradora principal. Juntas, Tanya, Kate y ella transformaron una parte del lago en un escenario de ensueño. Los colores vibrantes de las flores se reflejaban en el agua, creando un efecto mágico.
Mientras tanto, yo me ocupé de la elección del vestuario. Con la ayuda de Alice, cuya pasión por la moda era contagiosa, seleccionamos los trajes perfectos para la ceremonia. Pasamos horas revisando revistas y catálogos, probándonos diferentes combinaciones.
Dos días antes de la boda, Renesmee llegó con Jacob y él se fue, no le gustaba mucho estar bajo tanto movimiento, pero al ver la sonrisa de mi amiga desde la entrada, algo me decía que me había perdido algo.
- Dayan, ¿has pensado en las despedidas de solteros? - preguntó con los ojos brillantes.
- Eh, sí. Tu madre me llamó diciendo que quería hacer algo divertido, pero no sé exactamente qué... Quiere que estemos todos, Tanya, Carmen, tu y yo, tu tías Rosalie, Alice y bueno, la mujer de Carlisle, Esme.
- Vale. ¿Quién lo organiza, mi madre? - me miró confusa pero, antes de contestar, Bella llamó a Kate por teléfono.
- Espera. - me levanté y me acerqué a la cocina, escondiéndome en la pared para escuchar.
En la cocina, Kate había respondido al teléfono y estaba hablando con Bella. No podía oír mucho, como añoraba tener sus sentidos en ese momento. Me acerqué más, seguida de la mirada de Renesmee desde el salón. Bella se encargaría de gestionar con las chicas Cullens la despedida de Kate, pero no sabía nada de la de Garrett.
- Sí, sería una buena idea. ¿Cuándo?
- Esta noche, las chicas pueden venir. ¿Dayan sabe algo de la sorpresa?
- No Bella, creo que le encantará... ¿sabes si los chicos harán algo para la de Garrett?
- Edward no me comentó nada. Supongo que cazarán...
- No le gustará...- dijo Kate bajando la mirada y manteniendo el móvil en su oído.
Estaba tan centrada en saber lo que decían, desde que me nombraron, que no me di cuenta de que era observada por unos ojos marrones y otros rojos. Detrás de mí, Renesmee estaba callada, viendo como escuchaba a escondidas, me encantaba la verdad, pero a unos centímetros de mí, el prometido de Kate me miraba con una sonrisa y me cogió por la cintura, tapándome la boca.
- Shh... pequeña Denali. - sonrió a mi oído. - Has fastidiado la sorpresa que te teníamos por la ayuda esta semana... - me bajó y se agachó un poco para quedar a mi altura. - ¿De qué te enteraste, cotilla?
