Capitulo 16.

3.8K 268 157
                                    

Este capítulo va dedicado a @Sombrerera-amor y  @claravev por ser las personas más activa en el capítulo anterior🫀🫶🏻

— Mónica —
Una piedra en el camino.

«De eso nos encargaremos nosotros»

Fue lo que dijo Donovan antes de salir de la bodega junto con James y Landon. Dejándome sola, asustada y con el corazón en la garganta.

No era el hecho de que me hayan dejado allí, a fin de cuentas, creo que esa es la esencia principal de un secuestro. Lo que no me gustaba era la sensación de incertidumbre que me provocaba la situación. Me carcomía el no saber lo que estaba pasando ¿A donde fueron? ¿Con quien están? ¿Cuando volverán? ¿Acaso volverán?

Hay una mínima posibilidad de que no regresen, que todo lo que dijeron fuera una completa farsa, una forma de hacerme sentir bien al darme esperanzas de vida. Es posible que después de todo si que quieran matarme, quizás primero quieren torturarme, jugar con mis emociones hasta que yo misma les pida a gritos morir.

Lo peor del caso es que aún seguía atada a la silla, me era imposible mover alguna parte de mi cuerpo, a excepción de mis dedos.

Y eso no era todo, Donovan me había cubierto los ojos con una venda antes de marcharse. Frente a mi no había más que oscuridad, penumbras.

Al menos no me cubrió la boca, eso es un avance, teniendo en cuenta que es un bastardo sin corazón, seguramente no hay nada dentro de él que lata.

De pronto llegaron a mi mente los recuerdos de Donovan y yo durmiendo juntos. La manera tan protectora en sus brazos y piernas se enroscaban en mi cuerpo, como si temiera que yo fuera a escapar o que por defecto, todo eso solo se tratase de un sueño.

Mi cabeza en su pecho, escuchando como cada latido de su corazón chocaba contra su caja torácica, su respiración tranquila mientras la mía era un torbellino sin ritmo alguno.

¿Por qué tengo que recordar aquello? ¿Por qué me esfuerzo en recordar algo tan lindo cuando todo eso no fue más que un momento efímero?

Tengo que enfocarme en el ahora, lo que estaba pasando conmigo ahora. Ese chico no es más que un criminal, un asesino, un monstruo satánico, engendro del mal que solo quiere desvivirme del mismo modo que seguramente lo hizo con muchas otras personas.

El sonido de la puerta siendo abierta me asustó.

—¿Quién es? —pregunté con pánico— ¿Quién está ahí? Habla de una vez.

Pero no respondió.

Al no poder ver, mi sentido de la audición parece haber tomado el control de mi. De pronto escuchaba mucho mejor que antes.

Pero eso no es algo bueno en estos momentos.

La sensación de ser observaba me erizó los vellos de la piel. Giré mi cabeza en todas direcciones como si aquello pudiera servir de algo.

—¿No piensa decir nada? —volví a preguntar.

El sonido del metal siendo chocado con más metal me genero escalofríos. Podía distinguir fácilmente el rose de los cuchillos siendo afilados el uno con el otro.

Mis ojos se llenaron de lágrimas nuevamente.

Ya había llegado el momento. No había vuelta atrás.

Moriría igual que un animal. Moriría del mismo modo en que mueren las vacas en el matadero.

—No, por favor no hagas esto...

Quise decir Donovan, pero la verdad es que no estaba segura. Tal vez mi verdugo no era él, quizás le habían encomendado la misión a Landon o inclusive a James.

Sombra de lágrimas [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora