Sombra de lágrimas [+18]

Capitulo 17.

— Mónica —
Mi mejor beso.

—¿Que acabas de decir? —pregunté incrédula— ¿Que no eres un monstruo?

—Pues no, Mónica. No lo soy.

Tenía que estar bromeando. Tan natural era para él asesinar personas que ni siquiera lo consideraba un acto de crueldad, algo que haría un verdadero monstruo.

La mirada de Donovan estaba clavada en mis ojos como si de dos espinas se tratara. Era una mirada que me traspasaba la piel, me había sentir dudosa lo que realmente me provocaba su cercanía.

Donovan no me asustaba, solo me asustaba aquello que hizo. Me asustaba la existente posibilidad de que pudiera hacerme a mí algo semejante. Pero en momentos como estos, cuando podía tenerlo tan cerca de mí sin cuchillos, sin armas, sin su mirada de desquiciado que tanto me perturbaba, creo que entonces no me parecía tan malo tenerlo cerca de mi.

¿Sentirán eso mismo mis hermanas por James y Landon? Quizás por eso se rehusan a dejar de frecuentarlos, quizás por eso disfrutan tanto de su compañía, porque al no saber las atrocidades que hay detrás de los Bennett su presencia puede convertirse en algo más, en una droga tan potente que es capaz de hacerte olvidar que hay alguien más.

Donovan acercó su cuerpo unos cuantos centímetros más hacia mí, haciendo que por inercia yo intentara alejarme de él, pero ¿a donde? Mi cuerpo enseguida chocó con el espaldar de la cama.

—Donovan, me tengo que ir.

—Nah, tú no tienes que ir a ningún lado —respondió él con una sonrisa picarona.

—Claro que si, Donovan. Tengo universidad ¿lo olvidas?

Su sonrisa se enganchó aún más.

—Móni, faltan como cuatro horas para que comiencen las clases. Además, tú no vas a ir hoy.

—¿Cómo por qué no iría yo a mis clases?

—Porque yo lo digo —repuso firme.

—¿Y tú eres...?

—Tú verdugo.

Ahora era yo quien me reía.

—Eso no tiene nada que ver con mis clases, no pienso reprobar por tu culpa Donovan.

Un suspiro cansado salió de sus labios.

No entendía porque Donovan se frustraba. Tal vez yo no sería como soy si tan solo él me hablara de forma directa y no con sus tontas frases de mafioso.

Se cree que tiene el poder sobre todos a su alrededor.

¿Será esa la razón de su odio hacia mi? Quizás le molesta mi actitud, debe molestarle el hecho de que me enfrente a él cada tanto y que no me guste nada el tener que seguir órdenes suyas.

—Quiero que descanses, Mónica. Las últimas horas fueron muy agitadas emocionalmente para ti y no has dormido nada en toda la noche.

—¿Qué más te da a ti si duermo o no duermo? —le pregunté a la defensiva? Te recuerdo que fuiste tú quien me secuestro hace tan solo unas horas.

Me frustran sus cambios de actitud. Donovan es un bipolar de mierda y está comenzando a cansarme tener que lidiar con él todo el tiempo. No termino de entender al chico y eso me mantiene en un estrés constante.