POWER RANGERS 5: Evolution

Capítulo 3. Enfrentando lo desconocido

Luego de eso, todos los Rangers volvieron a sus casas para descansar, aunque sabían que tendrían a sus familias haciendo preguntas, aún más, Kol sabía lo que seguía, porque a la mañana siguiente, cuando llevó a Elena a la Universidad, fue a la empresa, pero encontró a su papá en la oficina, sentado frente al escritorio con la vista en la televisión.

—...nadie puede explicar lo que pasó, pero muchos gobiernos agradecieron la intervención de los Rangers de Nueva York, gracias a ellos, cayó un grupo terrorista que atemorizaba varias ciudades de Tailandia, aún no tenemos declaraciones del gobierno Tailandés, pero se reportó que este grupo de terroristas tenía en su poder armamento procedente de los Estados Unidos, producido por Industrias Mikaelson, tampoco tenemos declaraciones del presidente de la compañía, pero todo el mundo está al tanto de la alianza entre los Rangers, NTAC e Industrias Mikaelson, no sabemos si ahora los Rangers van a cuidar a las personas de otras personas, eso generó infinidad de agradecimientos y quejas, porque muchos reprochan la intervención de los héroes de Nueva York...—Richard apagó la televisión y se giró hacia su hijo, el cual suspiró.

—Estoy preocupado Kol—dijo Richard seriamente.

—Yo también—admitió Kol, sabía que hasta la nieta de la vecina iba a reprocharle lo que pasó.

—¿En serio?, ¿Por qué estás preocupado?—dijo Richard curioso, pero Kol lo miró dudoso.

—Pues...tengo muchos problemas—

—¿Tú o el Ranger Rojo?—preguntó Richard levantándose de su silla, pero Kol no esperaba eso.

—Ambos, luego de ocho años, es inútil diferenciar mis problemas personales de los que tengo cuando uso esa Gema—dijo Kol con sinceridad mientras cerraba la puerta, pero no se movió de la entrada de la oficina.

—El Ranger Rojo siempre ha tenido problemas, y tú también, no hay novedad—dijo Richard incrédulo.

—Yo sé que es grave que perdiera esas armas...—empezó Kol, pero Richard se cruzó de brazos.

—¡Claro que es grave!, pero no es raro Kol, dirigí esta compañía por más de treinta años, sé que los cargamentos se pierden, son robados o desviados—dijo Richard molesto, y Kol se veía confundido.

—No entiendo, ¿Estás enojado por eso?, porque destruí las armas y debo trabajar en el rastreador, y viajaré a Washington para mandar a Adam al diablo, lo resolveré—aseguró Kol, pero Richard suspiró.

—Quiero saber en qué momento mi hijo dejó de confiar en mí, ¿Sabes que es lo único—aparte del riesgo que corres—que me molesta de que tengas esa Gema?—dijo Richard de repente, y Kol no supo qué responder.

—No, la lista es larga—dijo Kol resignado.

—No, no lo es, pero desde que tienes esa Gema, dejaste de confiar en tu papá, eso me molesta Kol, sé todo lo que pasó, pero no esperaba que ignoraras a tu papá en un asunto de tu vida personal—dijo Richard molesto, pero Kol lo miró dudoso.

—Papá, yo no sabía de esto hasta que...—

—No me importa Kol, no tengo por qué enterarme de este problema por el maldito canal 6, que todos desaparecieran dos días, no fue buena señal, pero no esperaba esto—dijo Richard incrédulo.

—Estoy perdido, ¿Estás o no estás enojado por el asunto de las armas?—dijo Kol confundido, y Richard tomó aire pacientemente.

—Kol, ¿Para qué tienes a tu anciano padre si no es para ayudarte?—dijo Richard más tranquilo, y Kol se sintió como un niño pequeño.

—Lo lamento papá, es que metí la pata—dijo Kol preocupado, y Richard negó ante eso.

—Eso no es cierto—