la magia de la amistad y el impredecible amor

Respuestas de un antiguo dragón

Luego de esa gran revelación, la pareja quedó boquiabierta ante la situación. Ambos estaban totalmente confundidos y en shock. Esta situación hizo que Selene descendiera de los cielos y se postrara frente a ellos con una sonrisa de oreja a oreja. Con una voz serena, se dispuso a hablar para aclarar sus dudas.

Selene: Sé que tienen muchas preguntas, y se las aclararé con gusto. Pero por ahora necesito que guarden en secreto lo que acabo de decirles. Mañana, apenas caiga el sol, llegaré a su hogar y responderé todas sus incógnitas. ¿Puedo contar con su silencio?

A pesar de que aún seguían en shock, ambos asintieron como pudieron, todavía incrédulos por lo que acababan de presenciar. Luego de eso, Selene se puso su capucha y se elevó en el aire con sus alas.

Selene: Estaré esperando la hora para hablar. Por favor, pony, cuida de mi hermanito. ¡Me encanta tu melena!

Acto seguido, Selene salió disparada hacia un lugar lejano, provocando una pequeña explosión sónica. Twilight y Spike seguían incrédulos, pero después de un rato recobraron por completo su consciencia. Con la magia de ambos, regresaron a su hogar, donde encontraron una sombra iracunda que, apenas los vio, se lanzó contra ellos... para abrazarlos.

Luna: ¡Ay, mis amores, están bien! ¡Dios, estaba muy asustada de que les pasara algo! Mis preciosos amados...

Twilight y Spike, al percatarse de que era Luna, suspiraron aliviados y luego la acariciaron para calmarla.

Twilight: Luna, ¿qué haces aquí? ¿No deberías estar en el reino de los sueños?

Luna: De hecho, sí estaba monitoreando los sueños. Pero de un momento a otro, vi cómo sus sueños fueron interrumpidos de golpe, así que vine a revisar qué pasaba. Encontré su casa rodeada de cinco de esas bestias que ustedes describieron. Pensé lo peor, así que con toda mi furia usé mi magia y ataqué a las bestias. Estas huyeron apenas lancé el primer ataque. Luego me quedé esperando a ver si volvían. Por suerte, ustedes lo hicieron y ahora están conmigo, gracias al destino.

Twilight y Spike intercambiaron miradas preocupadas, pero decidieron no mencionar a Selene por el momento. En lugar de eso, se concentraron en calmar a Luna.

Spike: Gracias por proteger nuestro hogar, Luna. No sabemos qué habríamos hecho sin ti

Luna: Siempre estaré aquí para ustedes. Ahora, cuéntenme todo lo que ha pasado

Twilight y Spike se miraron, sabiendo que tendrían que revelar parte de lo que Selene les había dicho, pero también conscientes de la promesa de guardar silencio hasta el día siguiente. Tomaron aire y comenzaron a relatar los eventos recientes, omitiendo cuidadosamente los detalles más confidenciales.

Twilight: Nos encontramos con algo inesperado, algo que no habíamos previsto. Es una larga historia, pero por ahora necesitamos descansar y procesar todo lo que ha ocurrido

Luna asintió, comprendiendo la necesidad de descanso de sus amados.

Luna: Está bien, descansen. Mañana hablaremos más a fondo. Solo quiero que sepan que siempre estaré aquí para ustedes, pase lo que pase

Con esa promesa, Luna los abrazó una vez más antes de retirarse al reino de los sueños, dejándolos a solas en su hogar. Twilight y Spike intercambiaron miradas cansadas pero determinadas, sabiendo que el día siguiente traería respuestas y, posiblemente, más preguntas.

Finalmente, la unicornio y el dragón se fueron a la cama, acomodándose suavemente y abrazándose con cariño. Luego de eso, se adentraron en el reino de los sueños para descansar. Al día siguiente, los primeros rayos de sol hicieron que ambos se levantaran para comenzar su día. Al mismo tiempo, en un lugar muy alejado de Ponyville, Selene se encontraba durmiendo apaciblemente. Estaba acostada en una gran cama, en la cual se podían ver otras dragonas femeninas, todas cubiertas por una gruesa sábana que las protegía del frío. Todas estaban realmente cómodas entre sí, pero eso no les duraría mucho, ya que un fuerte aplauso las despertó a todas dos horas después de que saliera el sol.