CAPITULO 12

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Y allí se encontraba Vox, sujetando el control y pasando infinidad de canales para encontrar algo bueno que ver entre tanta basura televisiva

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Y allí se encontraba Vox, sujetando el control y pasando infinidad de canales para encontrar algo bueno que ver entre tanta basura televisiva.

Pero si nos enfocamos en su cara, se podía notar como apretaba los dientes cualquiera podría decir que se estaba guardando un rencor de los mil demonios.

Y era cierto, pues en su cabeza solo se repetía la conversación qué había tenido con Valentino hace una semana atrás...















Vox había visto la transmisión por televisión del encuentro de Zero, pero fue todo una sorpresa al ver que su amigo en vez de haberla agarrado a puños en ese mismo instante solo se limitó a levantarla como si fuera una especie de princesa en apuros y llevársela ¡pero que mierda! Fue lo que pensó.

Pero después su mente se aclaró, tal vez la iba a traer al edificio para darle su merecido aquí. Eso es más que seguro.

Aún así, fue una real y amarga sorpresa que al verlos llegar cada uno tomo un rumbo diferente, como si no hubiera pasado nada.

Rápidamente el overlord apagó el televisor lanzando al control remoto por los aires tratando de alcanzar a Val, tocó su hombro y le hizo saber que estaba detrás de él.

El más alto giró para verle, en su rostro se veía un poco de paz y tranquilidad — ¿qué carajos? — fue lo que soltó el TV.

El más alto solo reaccionó con levantar los hombros — ¿qué sucede? — Vox apretó levemente el hombro del contrario —¿cómo que qué sucede? ¡Que pasa contigo! ¡Esperaba que le dieras su merecido a esa perra! Y resulta que llegas aquí y la dejas andar por ahí como si nada —

— ¿y cuál es el problema? — respondió él con bastante paz.

Vox quitó su mano asqueado —¿qué te sucede? ¿Por qué de repente has cambiado? ¿A donde se ha ido el Valentino qué conozco? ¿Ah? ¡DÍMELO! —

Valentino golpeó la pared para callarlo y apegó su cara a unos centímetros de su amigo — ¡NO SE! ¡NO SE QUE PUTAS ME PASA SI QUIERES DÍMELO TÚ PORQUE YO NO LO SE! ¡AHORA DÉJAME EN PAZ! — soltó para en un instante irse a encerrar a su habitación.

...
























Y justo cuando había encontrado algo de su gusto, una puerta sonó se trataba de la maldita coneja de orejas caídas.

— ¿Tú de nuevo? — exclamó Vox tratando de no sonar rudo ni enojado, Zero lo miró con ojos tranquilos y serenos — lastimosamente si, iré a dormir — se dirigió a su habitación arrastrando las patas.

Pero esto no se iba a quedar así.
El overlord levantó el trasero del sofá y antes de que la contraria cerrará la puerta colocó su pie como impedimento — oye...— murmuró.

La coneja permaneció quieta, no intentó cerrar la puerta con más fuerza o algo similar — ¿Necesitas algo? —

El overlord no sabia que decir —... Este... Yo... —

— ¿Alguna vez te has enamorado? —

Cuestionó.















Al oir esa pregunta mi corazón latió fuertemente, ¿por qué esa pregunta? ¿Por qué ahora?.

Negué sin saber si era la respuesta correcta — no... — murmuré entre los dientes, Vox tensó su boca — ¿qué sientes por Valentino? —

Esa pregunta había caído mucho peor que la anterior — pues, nada ¿qué voy a sentir por él? — respondí fingiendo cero importancia.

El overlord acercó su cara a la mía — eres una coneja muy linda... — susurró casi en mi cara y en un instante intentó darme un beso pero lo esquivé dando unos pasos hacia tras y cayendo al suelo.

Vox se tornó serio y sin dar explicaciones de sus acciones anteriores cerró la puerta.

...















Entre la oscuridad Vox se encontraba esperando a Valentino.
Al oír la puerta de inmediato se puso de pie, no había ni un solo pensamiento que le indicará qué no era él pues esa fragancia seductora era inconfundible.

— Val — pronunció Vox acercándose a el de forma tranquila tratando de darle un beso pero este lo detuvo con su mano — ¿qué intentas hacer? — preguntó.

...














Esa zorra...





















Vox permaneció en silencio unos minutos — ¿si fuera la coneja esa... Si me besarías? —

El cuerpo del contrario se tensó incluso dejó de respirar por unos insignificantes segundos. y por fin Vox entendió todo...

— has cambiado mucho Valentino — murmuró en un tono desalentador.

Lo último que le quedaba a Vox por hacer era aceptar su derrota, probar su madurez y aceptar que las cosas cambian así como Valentino lo había hecho.

Es parte de la vida incluso después de la muerte.

A lo cual el contrario suspiró — si quieres que me vaya o que ya no haga parte de los Vees solo dímelo — Vox negó — no... Nada de eso, supongo que perdí... Supongo que la coneja gano este encuentro —

El TV se alejó — me costará un poco pero me adaptare al nuevo tú — suspiró — duerme bien Val...

— por cierto, mañana Zero tiene una pelea en el canal 1... Por si quieres verla — fue lo último que dijo antes de desparecer por el pasillo.

Valentino quedó en silencio, dirigió su mirada hacia la habitación de Zero y...

No supo que pensar, por primera vez él estaba siendo intimidado por sus propios sentimientos confusos y revueltos...

Que desesperación.

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Continuará

¡Holi! ¡Volví!
Como saben, esta es la historia que gano las votaciones, así que estaré actualizandola lo más seguido posible hasta terminarla.

¡Gracias a todxs por su apoyo!

¡No olvides ser felices!

¡Bye bye!.  🐑

-𝐄𝐋 𝐏𝐑𝐈𝐌𝐄𝐑 𝐀𝐌𝐎𝐑 𝐃𝐄 𝐔𝐍 𝐎𝐕𝐄𝐑𝐋𝐎𝐑𝐃 -| 𝚅𝙰𝙻𝙴𝙽𝚃𝙸𝙽𝙾 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora