CAPITULO 20

390 51 10
                                    

Tenía que ganar

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Tenía que ganar.

Volví al cuadrilátero — ¡y volvemos al ruedo! — avisó el presentador.
Mi contrincante acomodó su cabeza — ¿Acaso buscas morir? Pensé que te rendirias — negué —no soy de rendirme o al menos no así — busqué con la mirada a Valentino quien no hizo ningún gesto o algo similar pero tan solo con sus ojos podía saber que me estaba animando.

La campana sonó, el demonio corrió directo a mi envié mi cuerpo hacia atrás fingiendo caer a lo cuál él intentó detenerse para no chocar contra la reja al ver como cayó en mi trampa lo golpeé en la espalda, aún así este tomó mi pie y me estrelló contra el suelo un par de veces.

¡Mierda!

Me dejó tirada en el suelo — ¿ya te rindes? — preguntó mientras levantaba su enorme pie —... N-no — dejó caer la planta del pie sobre mi cara — ¿y ahora? — sonrió.

—... N-no —

Volvió a pisar mi rostro con más fuerza — ¿ya? — repitió la misma acción — ¿ya? — soltó una carcajada.

El público comenzó poco a poco a bajar la bulla.

Por mi nariz comenzó a salir sangre — si te rindes te dejo en paz — soltó él volviendo a pisar mi rostro.

— ¡ya basta! — escuché gritar a Liz nerviosa intentando detener la pelea.

Al ver a Valentino este no se veía asustado ni nervioso...
Parecía como si aun creyera qué podría ganar.

El creía en mi a pesar de la situación

Mi rival tenía la intención de volver a pisar mi rostro pero lo detuve con las manos rápidamente di una vuelta sobre el suelo para quitarme, me puse una vez más de pie.

Corrí hacia él con la intención de darle un último golpe pero a mitad de camino caí al suelo por los golpes qué había recibido en la cabeza.

Sentía como el Imbécil se acercaba a mi con una risa diciendo cosas como que era el mejor.
Proclamando su victoria.

Acercó su cara a la mía haciendo un par de muecas a modo de burla justo en ese instante levanté mi cabeza golpeando su cara a lo cual este se quejó de sobre manera.

Me levanté del suelo y el ruido del lugar aumentó, le di un par de golpes dirigidos a la cara del sujeto, este respondía de la misma forma.

-𝐄𝐋 𝐏𝐑𝐈𝐌𝐄𝐑 𝐀𝐌𝐎𝐑 𝐃𝐄 𝐔𝐍 𝐎𝐕𝐄𝐑𝐋𝐎𝐑𝐃 -| 𝚅𝙰𝙻𝙴𝙽𝚃𝙸𝙽𝙾 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora