🔥Extraños❄️

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- Ya te dije que no sé quién sea, en verdad no lo conozco. - dijo en un tono sufrido-

- Debes saber algo de él, siempre lo saludas. - respondió el peliazul sacudiendo de los hombros a su igual- Tan siquiera dime su nombre!

- Es un compañero de trabajo, por eso lo saludo, pero en verdad no sé nada sobre él. - intento zafarse del agarre de este-

- Cómo puedes saludar a alguien sin conocerlo?. -Bufo molesto-

El peliazul soltó al otro y se tumbó en el pequeño sofá de descanso, realmente ansiaba saber algo más allá de lo que él ya sabía sobre aquel peli oliva que llamaba tanto su atención, a pesar de haberlo visto hace años y haber quedado fascinado nunca se había atrevido a hablar con él.
Prefería mantener una distancia considerable  para no arruinar su única oportunidad, sabía la cafetería que frecuentaba, las librerías en las que era socio, el parque al que iba a descansar, los lugares en los que suele comer, pero no conocía ni su nombre y eso equivalía a nada, en cuanto descubrió que su amigo trabajaba en el mismo lugar corrió a preguntar sobre él, algo podría sacarle.

- Se le llama cortesía. - dijo mientras acomodaba su camisa- Algo que evidentemente no conoces.

- Me estoy volviendo loco y tú no deseas ayudarme, básicamente eres lo único que me llevaría a conocerlo. - echo la cabeza para atrás y cubrió su rostro con ambas manos -

- Vamos, no es que no quiera, pero en realidad no se nada sobre él, coincidimos un par de veces pero todo fue meramente laboral.

- Crees que si cambio de trabajo tendré la misma suerte que tú?.

- Ni lo pienses.

- Puede que hoy te haga falta mi compañía durante el día.

Sonrió, se le había ocurrido la magnífica idea de estar con Manigoldo todo el día, si tenía suerte en algún momento se cruzaría y tal vez finalmente le hablaría o lo observaría un poco más, ambas opciones eran buenas.
Durante gran parte del día había estado haciendo mandados para el otro, iba a dejar cosas, a traer otras e imprimia y copiaba otras más como todo un oficinista, sin embargo en todo ese tiempo lo único que logro fue ver un par de hojas con su nombre y su salario, al menos ya sabía cómo llamarlo.

- Hey! Creo que ha llegado tu gran momento. - enumerando unas cuantas carpetas dió una mirada a Kardia -

- Porqué?

- Necesito que dejes esto en la oficina de tu amorcito. - dijo en un tono burlón -

- Degel... - menciono mientras cargaba el material -

- Eh? - le dió una mirada extrañado-

- Su nombre es Degel, Manigoldo. - Le dió una mirada lasciva y tan afilada que podría cortarlo -

- trago saliva un tanto nervioso- Entiendo, su lugar está en el 6to piso salón 3-C.

- Vuelvo.

Salio de la sala en dirección al ascensor, para su suerte estaba vacío, entro y marco el piso al que iba, se sentía nervioso Pero intentaba apaciguar su mente, dió un largo suspiro y sintió como el ascensor se detenía, creyendo que habia llegado vio la pantalla y tenia marcado el "piso 4", lentamente la puerta se abrió dejando ver la silueta de una pelinegra quien ávidamente entro al ascensor y coloco nuevamente el piso al que iba el peliazul.

- Eres nuevo?. - pregunto volviendo la mirada-

- Eh?.

- Recién entraste a trabajar?

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