⚜️Volveré ⚜️

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Faltaba un día para partir a su próxima misión y aún no tenía planeado como decirle al ex general marino sobre ello.
Hacía exactamente un año desde que se frecuentaban y había sido inevitable el sentir cosas el uno por el otro por lo que decidieron entablar una relación, seguía pensando, si tan solo pudiera hacerlo de una manera sencilla, sabía que se pondría mal de saberlo, no iba a dejar que se fuera y mucho menos por seis meses.
Entonces fue cuando se le ocurrió, lo invitaría a tomar algo y se lo diría cuando fuera el momento adecuado, bajo hasta Géminis en busca del gemelo menor y por fortuna lo encontró solo, más fácil.

- Buenas tardes Kanon - esbozo una ligera sonrisa-

- Aioria... - sonrió tras decir su nombre- Buenas tardes

- Harás algo está noche?

- No lo creo, Saga salió hace dos semanas a una misión y no hay mucho que hacer por aquí.

- Vayamos a tomar algo al mismo bar de siempre, que dices?

- Está bien, pasas por mi?

- voy a hacer algunas cosas, te veo haya, a las siete en punto, en la misma mesa - sin cambiar su gesto de seriedad-

- Oh bien, te veo haya - intento dar una sonrisa calma-

Su corazón le dolió por un momento, al parecer Kanon estaba sospechando algo, lo conocía tan bien que sabía cuándo intentaba disimular sus sentimientos, había logrado destapar la tristeza que se reflejaba en aquellas esmeraldas que tanto le gustaban. Él también se sentía mal por dejarlo, no quería ausentarse por tanto tiempo, pero eran órdenes del patriarca.
Abandono a Géminis sin decir más, justo cuando estaba en la entrada logro escuchar un suspiro del geminiano, su pecho punzo una vez mas, avanzó las demás casas hasta salir del santuario, tal como le había dicho a Kanon, tenía cosas que hacer.

Él día para el peliazul había pasado tan rápido que en un abrir y cerrar de ojos ya estaba en el lugar acordado, aguardando por Aioria quién aún no llegaba, miro el reloj que marcaba 7:45, decidió esperar más, quizá tuvo un contratiempo, pidió un vaso de Whisky, dio el primer sorbo y volteo a la puerta, lo diviso buscándolo. Ya había llegado

- Disculpa la demora, no quería hacerte esperar tanto

- Descuida, estaba a punto de ir a buscarte

- Tuve un pequeño problema, pero ahora todo está bien, ya estamos aquí - sonrió y llevo su vista hacia una de sus manos que resguardaba el vaso con el licor- Veo que ya has pedido

- lo hice hace un rato, aún no lo término, tú vas a beber algo?

- No, así estaré bien pero tú pide lo que desees, yo pago

- Está bien - agachó la cabeza y volvió a hablar- Aún me quieres?

- Que?

- Aún sientes lo mismo por mi? -se precipitó a hablar-

- Claro que sí, aún sigo amándote como siempre, nada a cambiado.

- Estuviste muy raro todo el día, hay algo que deba saber?

- Siendo sincero, si lo hay...

- su corazón se detuvo, las manos le temblaron y el nervio se apoderó de él- Qué... Que es?

- El patriarca me asignó a una misión...

- se relajo, no era lo que creía, suspiro aliviado por un momento-

- Me iré por seis meses Kanon...- tomo sus manos entre las de él- Parto Mañana a primera hora

- Que?! - levantó la cara y apartó las manos de golpe, la noticia no era grata para él, al contrario- Cuando paso eso?

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