ALONNE 3: 𝐀𝐥𝐠𝐮́𝐧 𝐝𝐢́𝐚 𝐭𝐞 𝐥𝐨 𝐞𝐱𝐩𝐥𝐢𝐜𝐚𝐫𝐞

𝐂𝐡𝐚𝐩𝐭𝐞𝐫 𝟔

—𝘌𝘭 𝘬𝘢𝘳𝘮𝘢 𝘷𝘪𝘯𝘰 𝘱𝘰𝘳 𝘵𝘪 𝘕𝘦𝘨𝘢𝘯—

Vivian Camille Coleman Ford

Negan se levantó bruscamente del sofá donde estaba sentado y salió aterrado de la habitación, interiormente me sentía orgullosa de mi misma, orgullosa de haber dado en su punto débil, y lo mejor de todo; Yo sabía cual era su punto débil.

-¡Llevensela antes de que me vuelva loco!- oí el grito de Negan, poco después entro Simon y llevo de nuevo a donde estaba Lilith, la cual dormía.

Narrador omnisciente

Una vez que la pelirroja estuvo encerrada junto con la rubia, Simon se dirigió a donde estaba Negan, en su despacho, cuando entró se encontró con el hombre bebiendo un vaso de Whisky con velocidad, alterado.

-¿Te atacó?- pregunto Simon al ver lo alterado que estaba.

El nego.

-Ella no ataca. Ella muerde hasta desintegrar- respondió Negan. Simon frunció sus cejas ante las palabras de Negan, supuso que estaba borracho y por eso decía esas frases- Joder...Joder, y joder, ella sabe demasiado- gruño mientras golpeaba el escritorio.

Simon no podía entender como Negan podía estar tan afectado por algo que hizo una niña cualquiera, si bien el no podía negar el echo de que esa niña daba miedo, pero no entendía como Negan que no mostraba miedo a nada le temia tanto ahora que la tenia a la palma de su mano. Nisiquiera se mostró así de preocupado cuando ella vino a buscarlo al Santuario.

-¿Y que hizo?- pregunto queriendo entender más las cosas.

Negan bebió otro largo trago de Whisky, queriendo borrar las imágenes de su cabeza, queriendo olvidar esos dolorosos recuerdos y lo fuerte que fue ver como ella demostraba su conocimiento con ese simple maniquí.

-Le dije sorprendeme, y me salio con que conocía a Lucille. Ya no quiero que me sorprenda mas- exclamó el del bate con ironía desbordando en su voz ante lo acontecido con la oji azul- No parece que me hubiera metido con una persona, si no con un demonio. Porque esa jodida niña que está en esa habitación es tétrica y maniática a más no poder- gruño.

Simon parpadeo confundido.

-No entiendo, no le temiste nisiquiera a un grupo que nos pidia matar. ¿Por que vas a temerle a una niña que no sabe ni donde está parada?- pregunto.

Negan lo miro con una mirada inquietante, el más que nadie sabía que esa niña podía ser un peligro.