Resumen:
"¿Confías en mí?"
Harry asintió.
"Entonces ven conmigo.".
........
El primer día de exámenes no fue tan malo como podría haber sido. Era el examen escrito de Encantamientos, y los estudios de Harry parecían haber valido la pena. Su pluma apenas dejó de moverse, pocas preguntas requirieron más de varios momentos de reflexión para responder y completó su examen con tiempo de sobra. Fue seguido por demostraciones prácticas de sus habilidades, y aunque Anthony y Hermione los eclipsaron a todos, Harry no titubeó ni una sola vez.
Cuando los de primer año fueron despedidos, el aire general fue de alivio; la mayoría de los estudiantes parecían razonablemente seguros de que les había ido bien, incluso Neville, y Harry tenía la esperanza de que los exámenes restantes no fueran tan malos como había temido.
Al día siguiente, le tocó a Neville brillar; la profesora Sprout sonrió de oreja a oreja por su actuación y Harry se sintió muy contento por él. También estaba razonablemente contento con sus resultados y sólo se sintió un poco satisfecho cuando Malfoy agarró su mazmorra con demasiada fuerza y perdió una buena cantidad de puntos por ello.
Todos estaban cansados, sudorosos y sucios cuando terminó el examen, sin mencionar que tenían hambre de almuerzo.
—¿Cuándo es Astronomía? —preguntó Anthony con la boca llena.
"Medianoche", respondió Lisa con cansancio, tomando un sorbo de su vaso y con arcadas, rociando jugo de calabaza por todo su plato. "¡Pensé que era agua!"
"Ese era mi vaso", dijo Padma secamente.
Lisa frunció el ceño y tomó su agua.
Harry no pudo evitar resoplar, Su rió disimuladamente a su lado, Stephen golpeó su frente contra la mesa y, pronto, todos estaban riendo histéricamente sin ninguna buena razón.
Regresaron a la sala común para estudiar el resto del día y, posiblemente, descansar un poco antes de tener que subir a la Torre de Astronomía a una hora en la que todos preferirían estar durmiendo. Harry descubrió que no podía concentrarse en nada y optó por escabullirse, sin que nadie lo notara, a los aposentos de Severus para estudiar en paz. Transfiguración era el día siguiente y, si había un examen que podía retrasar a Harry un año, sería ese.
Severus le dio a Harry una media sonrisa detrás de una gran pila de pergaminos en su escritorio, donde estaba garabateando febrilmente, y Harry se sentó en el sofá con sus materiales de Transformación. Una vez que pasara este examen, lo peor habría pasado...
No es que la perspectiva fuera un gran consuelo, teniendo en cuenta que en realidad tendría que aprobar el examen para que todo terminara.
A Harry le resultaba bastante satisfactorio refunfuñar continuamente en voz baja mientras leía notas, practicaba movimientos de varita y hacía todo tipo de cosas que habría pagado mucho dinero por evitar.
—¿Puedes dejar de murmurar sin parar? —espetó Severus un rato después.
Harry levantó la vista, frunciendo el ceño. "Entonces lanza un hechizo silenciador, si es tan incesante".
Severus entrecerró los ojos. —Si fuera libre de lanzar encantamientos silenciadores a voluntad sobre estudiantes recalcitrantes, viviría el resto de mis días en un bendito silencio.
Harry apretó los puños. —Entonces usa tus tapones mágicos para los oídos para que no tengas que escucharlo.
"No me gusta tu tono."
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Confiar (To Trust) severitus (completo)
RandomJusto antes de cumplir undécimo cumpleaños, Harry es encontrado en un oscuro callejón de Londres. Posteriormente lo llevan a quedarse en la casa de un tal Severus Snape hasta que comienza Hogwarts. Harry no está muy seguro de qué lo impulsó a acepta...