-Tampoco estaba mal el chico.
-Odiaría que alguien contara que la tengo pequeña pero que "no estaba tan mal".
Hanae siguió riéndose mientras pedía perdón por sus palabras. Y aprovechando la conversación Baji se colocó la mano en la nuca.
-Entonces...- se miró nervioso la pierna -¿te gustó?
-No, me corrí por pena- comentó de forma burlesca rodando los ojos.
El pelinegro sonrió con la cabeza agachada, una sonrisa que Hanae no sabía si era por vergüenza o por orgullo pero intuía que era por ambas.
-¿Y cómo dormiste? ¿Qué tal en el hospital? ¿Qué pasó?
-Un niño de seis años llegó gravemente y no daban con el problema.
-¿Alguna alergia?
La joven miró incómoda los apuntes.
-No me gusta mucho hablar de mis pacientes, menos aún cuando son niños.
-No quería sonar brusco.
Apoyó la mano sobre su muslo -no no, es porque me parece un tema privado. A mí no me hubiera gustado que el equipo médico que me atendió hubiera contando qué me pasó y qué hicieron para ayudarme- sonrió -es un asunto de respeto. Hay conversaciones que simplemente no me parecen adecuadas.
-Sí entiendo, tienes razón.
-Pero no pasa nada, sé que no es lo normal y no es la primera vez que incomodo a alguien con esto, y quiero que sepas que no he creído que lo preguntaras para ofender ni nada parecido.
-Mejor porque nunca haría nada de eso.
-¿Nunca?- alzó las cejas -te he escuchado-
-A ti- le cortó rápido -a ti no te haría o diría nada de mal gusto.
-¿Lo dices para que me sienta afortunada?
-Deberías, porque eres una persona protegida.
-¿Protegida? ¿De qué me estás protegiendo?
-De mi malintencionada lengua.
-¿Sí?- el chico asintió -pues entonces creo que voy a pasar de tu protección.
Keisuke se movió por el sofá hasta ponerse a su lado, cuerpo con cuerpo, apoyando el brazo en el respaldo y dejándola acorralada. Pero Hanae era muy valiente para tentarle y no se movió, algo que a él le gustó mucho.
-¿La quieres?
-¿Tu lengua?- arqueó una ceja -¿he sonado desesperada?
Se inclinó hasta establecer una distancia muy poco prudente.
-Igual te sientes desatendida y no me gustaría que llegaras a eso.
-De hecho- ella también se aproximó, quedando peligrosamente cerca -hoy no me has saludado como gimoteaste que harías.
Baji se relamió de tan solo imaginarlo, clavando la vista en los tentadores y jugosos labios de Hanae, quien mostró una suave sonrisa.
-No tienes que pedirme que te bese- respondió confiado -lo hago con gusto.
Rompió la distancia que los separaba, rozando su boca para llegar a la mejilla, donde dejó un delicado beso; haciendo el mismo recorrido para volver al inicio, quedándose a las puertas del cielo.

ESTÁS LEYENDO
ANHELOS AL SUSPIRAR - BAJI
FanficEl pasado que comparten lo atormenta. El presente los vuelve a juntar y ninguno está dispuesto a desaprovechar la oportunidad de superarlo. ¿Podrán cicatrizar sus recuerdos? (Ver. Baji adulto)