"Rasgando los rostros,
tiñendo de rojo los órganos,
desprendiendo la epidermis,
lamiendo esas delicias.
Sumergido en esa carne rancia,
en busca de un orgasmo eterno,
el placer revienta los ojos,
eyaculando sangre sobre los cuerpos.
Rompiendo la cordura,
con cada extremidad amputada,
trasladado a un mundo oscuro,
El hambre traspasa la razón,
El hombre traspasa la razón,
con cada bocado,
golpeando el tórax con salvajismo,
tomando con las manos al corazón.
Inundando de sangre la mente,
Royendo huesos con sangre seca,
con vísceras y pieles esparcidas en la habitación,
los pensamientos son nulos,
las voces en su oído le obligan,
Siendo así,
Renace el hombre."20 de abril, noche
Entre lo que podría pasar y lo que nunca llegaría a pasar, nació entre la anarquía, una oportunidad de redención, la oportunidad de ayudar a un nuevo ser a florecer, entre el horror para sentir el calor y algún día poder ver el sol. Como surgió no importa, podría ser la radiación, un cerdo, una gallina, un turista que fue a un lugar remoto y fue atacado por un simio, incluso una delicada flor nueva descubierta recientemente, quizás múltiples de estas se combinaron, en el lugar correcto y en el clima correcto, un segundo antes o después, esa creación divina hubiera sido imposible. Este sería el inicio del virus de la radiación nuclear, un ser sin nombre.
21 de abril, mañana
Ese día no volvió a salir el sol, la iluminación era la necesaria para darse cuenta que era de día, pero está cada vez más apagada ante una niebla densa, fría y oscura. El exterior era como si todo lo de ayer se hubiera olvidado, que la paz volvió y una nueva civilización emergería, pero lo que paso es que como la mayoría del resto había muerto, los que quedaban solo enfrentarían más problemas si estos quisieran seguir viviendo. Santiago despertaría, ni cansado ni con ánimo, serían las 6 de la mañana y sin despertar a los demás, volvió al apartamento 237, debería volver como a las 8 o las 9, si no quería generar sospechas.
Entre las cintas que estaban por ahí, probo por unas dentro de una caja que no toco la vez anterior, esta caja tenía unas cintas marcadas en rojo, reprodujo la cinta y esta le mostró lo que había.
El Vindex presenta: Masked Ball
La filmación, ambientada en una casa adinerada de un estilo de 1930, con las mismas paredes, carmesí, presentaban a un cuerpo sin cabeza siendo vestido en un traje elegante y este cuerpo siendo tomado por los brazos por otro hombre, para luego bailar con este cadáver, el baile de ese estilo romántico, hacía que Santiago sintiese algo al ver la filmación. Continuando con esta filmación, después del baile, el cadáver sería guiado a una cocina, donde el traje sería retirado para luego quitarle la piel a este cuerpo y ser cortado en varias partes, la filmación se cortó por ahí para luego volver a un plano distinto, un plano después donde el cuerpo, ya mutilado sería servido en una mesa para el hombre que bailo con ese cadáver y unos hombres y mujeres más, estos disfrutando de la carne que este hombre sin cabeza dejo para ellos.
A la par de esto, a Santiago le dio una erección, metió la mano y se acarició la polla, mordiéndose el brazo para evitar gemir. Pensaba en esa carne mientras se masturbaba la polla, ese color rojo, ese sabor, esa textura. Mientras observaba un acercamiento de las personas comiendo esa carne, saboreándola, no pudo contenerse y término eyaculando, el semen quedando en la mano derecha del joven de cabello castaño.
—Estoy tan jodido, qué asco...— Dijo mientras retiraba la cinta.
Salió de esa habitación y miro por la ventana del apartamento 237 podía ver a un hombre acercarse para luego quedarse en frente de la puerta de entrada a la planta baja del edificio.
ESTÁS LEYENDO
🩸 𝓘𝓷 𝓽𝓮𝓷𝓮𝓫𝓻𝓲𝓼: 𝓬𝓪𝓻𝓷𝓮 𝔂 𝓷𝓲𝓮𝓿𝓮
HorrorAlgo que desencadena un gusto reprimido. Primer intento de historia que hago, por lo que no os esperéis una pieza de arte.